La imagen no ha desaparecido de la mente de los venezolanos: decenas de mesas bajo toldos rojos, cientos de personas haciendo cola desde la madrugada y letreros gigantes para anunciar un “Mercado a cielo abierto”. Al principio podían encontrarse a lo largo de la avenida Bolívar de Caracas o en el paseo Los Próceres, pero terminaron en 2015 porque la crisis no permitía tal derroche. Hasta ahora. A partir de este sábado 9 de septiembre vuelven los operativos y con una evidente motivación política.
El nuevo ministro de Alimentación, general Luis Ramírez Medina, no tiene más de tres semanas en el cargo y recibió la orden de reactivar los grandes mercados que marcaron el gobierno del fallecido presidente Hugo Chávez.
El Nacional Web conoció de manera extraoficial que la nueva jugada gubernamental es vender comida en todo el país a precios subsidiados como una forma de “contentar” a los venezolanos y hacerlos apoyar a los candidatos oficialistas para las elecciones regionales de octubre.
A menos de 50 días para los comicios, serán los abanderados de Nicolás Maduro quienes escogerán los lugares de venta y harán campaña en los mismos. La jornada de este sábado será en 10 estados del país, entre los que destacan Aragua, Miranda, Carabobo y Lara.
La decisión se tomó “arriba” y de forma apresurada. En 2012, 2013, 2014 y 2015 podían encontrarse casi todos los productos de la canasta básica -casi todos marca CASA- a precios subsidiados, incluso los perniles y materiales para realizar hallacas en noviembre y diciembre. Para los nuevos operativos se hizo “de tripas corazón” y el gobierno aseguró la venta de pollo, carne, pescado y algunas hortalizas. Mientras que otros alimentos como harina, arroz, azúcar, café, pasta y granos están en “veremos”. No se ha capitalizado si usarán productos de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP) o importados.
DATO
Después de la muerte de Chávez, en 2013, los grandes mercados a cielo abierto comenzaron a decaer. De las plazas pasaron a puntos claves en las parroquias, luego a sitios coordinados con los consejos comunales, hasta agosto de 2015. Cuando la crisis no permitía seguir haciendo los operativos entraron en el juego político los CLAP, estructura que comenzó dando una bolsa con al menos 10 alimentos, entre importados y nacionales, y que ha avanzado a una caja llena de productos mayormente mexicanos.
Fuente: El Nacional
Por Confirmado: David Gallardo