«Lamentablemente, el pueblo venezolano nunca contó con la protección, con el tutelaje internacional en materia de derechos humanos». Así lo aseguró el canciller Elías Jaua, quien hoy leyó el comunicado que el presidente fallecido Hugo Chávez envió el 6 de septiembre de 2012 para ratificar la decisión «soberana» de retirar a Venezuela de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos.
Explicó que Venezuela no se está saliendo del Sistema Interamericano de los Derechos Humanos, «solo estamos denunciando una de sus dependencias» y lamentó que la organización «no siga el ejemplo universal de promoción y protección de derechos humanos en cuanto al necesario proceso de revisión y reforma que requiere para la aplicación y observancia de la Convención Americana de los Derechos Humanos».
«La República Bolivariana de Venezuela se mantiene comprometida en profundizar la cooperación con el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, así como son los comité que examina los informes de la convenciones ratificados por Venezuela, esperando que este sistema se consolide como un ámbito eficiente y objetivo para impulsar una verdadera promoción y protección de todos los derechos humanos», reza el comunicado.
Jaua denunció, además, que la Comisión y la Corte IDH no han respondido a interrogantes del Gobierno venezolano por lo que las calificó como organismos parcializado políticamente y aseguró que ambas instituciones se encuentran secuestrada por un grupo de burócratas «que han bloqueado, obstaculizados e impedido que se hagan las transformaciones necesarias».
Aclaró que pese a la separación de Venezuela del Sistema Interamericano, el Gobierno nacional mantiene su compromiso con la lucha por garantizar los derechos humanos. «La mayor garantía de los derechos humanos, es la revolución bolivariana».
«La denuncia de Venezuela al Sistema Interamericano que entra en vigencia este martes, no tiene ninguna consecuencia para el pueblo venezolano, más aun si se considera que los casos procesados y las sentencias de la Corte en los últimos años no han sido para favorecer a ningún ciudadano de a pie venezolano», enfatizó.
Comentó de casos de violaciones a derechos humanos cometidos por gobiernos anteriores que aseveró «jamás tuvieron respuesta ni medidas cautelares para sus víctimas por parte de la Corte IDH».
Entre los que mencionó se encuentran el caso de los más de 50 estudiantes asesinados en Caracas entre 1990 y 1991 por la Policía Metropolitana; los campesinos que en la población de Yumare, estado Yaracuy, brutalmente fueron reprimidos por la Guardia Nacional hace 27 años; los trabajadores de la Siderúrgica del Orinoco (Sidor) que fueron asaltados por comandos de la antigua Dirección General Sectorial de los Servicios de Inteligencia y Prevención (Disip) y los torturados y desaparecidos por el terrorista Luis Posada Carriles.
Fuente: El Universal