Hay muchas formas de abrir una cerveza. Las más habituales apenas requieren algún esfuerzo de nuestra parte pero siempre hay gente a quien le gusta complicarse las cosas y así tenemos esta compilación de formas creativas, diferentes y no todas reales (hay que decirlo) que van desde usar una motosierra, un soplete, los dientes y hasta un rifle. Eso, por no mencionar la sorprendente incorporación de algunas curiosas regiones corporales al conjunto de herramientas capaces de lograr tal objetivo.