Un flan es un postre que siempre suele sentar bien, en cualquiera de sus variantes.
Si quieres probar una receta realmente sencilla, no tienes más que probar con esta versión light de mandarinas.
Su base de preparación se parece bastante a la parte superior de un cheesecake y lo tendrás listo en cuestión de minutos.
Ingredientes:
Una taza de zumo de mandarinas
Una taza de queso blanco tipo Filadelfia 0%
Una cucharada de agar-agar
Una cucharada de semillas de chía
Dos cucharadas de agua
Dos cucharadas de dulce o mermelada de naranja 0%
Endulzante permitido al gusto
Preparación:
Coloca a calentar el zumo de mandarinas en una cacerola con el agar-agar y las semillas de chía a fuego bajo. Cuando comience a espesar y tomar cuerpo, apaga el fuego y mezcla con el queso blanco 0% hasta que se integren por completo. Añade el endulzante permitido que empleas habitualmente y lleva al refrigerador por espacio de, mínimo, dos horas.
Posteriormente, no tendrás más que preparar una salsa con la mermelada o dulce de naranja y el agua, calentando en una sartén o en el microondas simplemente hasta que se integren ambos elementos. Sirve el flan con dicho acompañamiento y unas hojitas de menta, que nunca sientan mal a la hora de decorar.
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