Atilio Rodríguez, director de la Región Occidente del Programa Escuela de Fe y Alegría, resaltó que, durante casi 70 años de operatividad, este Movimiento de Educación Popular se ha distinguido por su capacidad para interpretar la realidad venezolana y ofrecer respuestas adaptadas a cada contexto.
“En este momento estamos intentando, en medio de la crisis y la desesperanza, crear las condiciones para seguir garantizando el derecho universal a la educación”, declaró Rodríguez este viernes en el programa De Primera Mano Tv, que transmite Canal 11 del Zulia y Radio Fe y Alegría Noticias.
El director de la Región Occidente del Programa Escuela de Fe y Alegría señaló que muchas familias viven un estado de desesperanza que les impide ver la educación como una oportunidad de progreso para sus hijos, lo cual ha sido todo un reto el poder cambiar su mentalidad.
Para Rodríguez, Fe y Alegría sigue siendo una alternativa en Venezuela debido a su capacidad de integrar la voluntad, el sentir y la participación activa de la gente, los maestros y los directivos de cada centro educativo para luchar por ofrecer una educación de calidad e impulsar el crecimiento de las comunidades.
“Nosotros hemos caracterizado a nuestra población estudiantil según las condiciones que tienen y, desde allí, hemos presentado la propuesta educativa adecuada a cada situación”, resaltó.
Monitoreo y corresponsabilidad familiar
Además, mencionó que implementaron un sistema de monitoreo permanente de la asistencia de los estudiantes, con protocolos específicos de atención basados en la frecuencia de asistencia o inasistencia de cada niño.
Esta técnica hace sentir a las familias acompañadas y corresponsables en la búsqueda de soluciones conjuntas que garanticen el derecho de sus hijos a la educación.
Subrayó que se esfuerzan por interpretar y analizar los problemas sociales desde las aulas, buscando vías de solución. “Durante todos estos años, hemos intentado ofrecer la mejor educación con programas de vanguardia a nivel mundial”.
Nuevo año escolar
En cuanto al porcentaje de inscripción para el nuevo año escolar 2024-2025, admitió que, hasta el momento, es bajo debido a la incertidumbre que enfrentan las familias, muchas de las cuales están considerando migrar.
No obstante, destacó que son conscientes de que muchos representantes suelen dejar la inscripción para el último momento.
Pese a este panorama, afirmó que pocos docentes han abandonado sus puestos y que los equipos directivos trabajaron durante sus vacaciones en agosto para garantizar las mejores condiciones de aprendizaje en los centros educativos.
Al igual que lo expresó Noelbys Aguilar, directora nacional del Programa Escuela de Fe y Alegría en Venezuela, Rodríguez reafirmó que la meta para el período 2024-2025 es la recuperación de conocimientos clave, como el lenguaje, la escritura y las matemáticas, con un enfoque especial en el razonamiento lógico.
Mantener la esperanza en la educación
Por otro lado, Rodríguez reconoció las contribuciones de los padres y representantes para sostener los gastos operativos y de funcionamiento de las escuelas, ya que a través del convenio con el Ministerio de Educación y la Asociación Venezolana de Educación Católica (AVEC), solo reciben ingresos para el pago del personal.
Hizo un llamado a mantener la esperanza y la fe en la educación en Venezuela, enfatizando la necesidad de que se haga justicia en términos salariales para los educadores.