La farmacéutica estadounidense Lilly anunció hoy la intención de invertir 2.500 millones de dólares en la construcción de una nueva planta de fabricación de alta tecnología en Alemania para ampliar su capacidad de producción de medicamentos inyectables y los correspondientes bolígrafos para aplicarlos.
Está previsto que este nuevo centro de producción en Alzey, en el estado federado de Renania-Palatinado, entre en funcionamiento en 2027 y dé empleo a hasta mil especialistas altamente cualificados, como ingenieros, operarios de planta y científicos.
Además, durante la construcción de la planta, prevista a partir de 2024, se crearán hasta 1.900 puestos de trabajo adicionales, según un comunicado.
«Cada inversión en nuestras capacidades globales de fabricación es un compromiso con los pacientes de hoy y con las personas que puedan necesitar nuestros medicamentos en el futuro», declaró en rueda de prensa el vicepresidente ejecutivo y presidente de operaciones de Lilly, Edgardo Hernández.
Agregó que esta planta de fabricación de inyectables de última generación, «dotada de la tecnología más avanzada», permitirá a la farmacéutica «seguir suministrando de forma fiable medicamentos seguros y de alta calidad».
Decisión de Lilly
El ministro alemán de Economía, Robert Habeck, por su parte, calificó la decisión de Lilly de «buena noticia para Alemania como emplazamiento industrial», que creará puestos de trabajo nuevos y sostenibles y mejorará la atención sanitaria de los ciudadanos.
A su vez, el titular de Sanidad, Karl Lauterbach, subrayó que «esta inversión refuerza los empeños del Gobierno por hacer de Alemania un lugar más atractivo para la industria farmacéutica», y agregó que «esto demuestra que en Alemania se pueden desarrollar y fabricar con fiabilidad buenos productos innovadores».
Agregó que Alemania seguirá mejorando las condiciones marco para la investigación y la producción con el fin de garantizar que los pacientes tengan un acceso rápido a nuevas opciones de tratamiento y reducir la dependencia de las frágiles cadenas de suministro.
«Europa necesita una industria farmacéutica y una investigación fuertes, también para una asistencia sanitaria buena y segura. Alemania quiere dar aquí nuevos impulsos», subrayó.
La farmacéutica tiene previsto invertir, además, hasta 100 millones de dólares en el ecosistema de empresas emergentes del sector de ciencias de la vida y biotecnología alemán, con el fin de reforzar sus relaciones con los sectores científico y público y diversificar la presencia creciente de la compañía en Europa.
Con la planta prevista en Alzey, Lilly dispondrá de seis centros de producción en Europa con los que creará sinergias operativas.
CNN