Vecinos del sector La Limonera, en Baruta, dieron ayer el último adiós a José Luis Ponce, carpintero y militante del PSUV, cuyos restos fueron velados en la Terraza 5 de la urbanización. El hombre, de 44 años de edad, falleció el lunes a las 7:00 pm, cuando recibió un balazo en la cabeza mientras regresaba a su casa, tras constatar que el Centro de Diagnóstico Integral de Piedra Azul no había sido quemado. Ante versiones que involucran a sectores de la oposición, Celided Ponce, hermana de la víctima, aseguró que no puede atribuir el caso a ningún bando político.
“Quizás se trata de una persona que, llena de odio, los atacó sin mayor razón. No puedo decir que quien lo mató pertenece a un bando político u otro. Solamente Dios sabrá. Ya José está muerto y nadie lo va a revivir. No quiero ir contra nadie. Sólo espero que se haga justicia”, señaló.
Sobre las hipótesis que circulan, cree que es difícil que desde el conjunto residencial Montepino se haya accionado el arma que acabó con la vida de Ponce.
“De todas las versiones, creo que la más coherente es la de un vehículo que pasó detrás de él y desde ahí le dispararon. El primer impacto lo recibió Rosiris Reyes, que lo acompañaba en la moto, cuando se dirigían a su casa luego de verificar que no se estaba quemando el CDI. Después de que ella cae, él recibe un disparo en la cabeza”, relató Celided Ponce, en el funeral efectuado ayer en la mañana.
Versiones van y vienen. Algunos vecinos creen que el homicidio está relacionado con grupos delictivos que operan en la zona. “Él era un hombre pacífico, que intentaba erradicar la inseguridad de La Limonera. Por eso no descarto que su muerte esté relacionada con algún malandro, que se haya molestado por un reclamo que José le hubiera hecho”, señaló ayer una de las asistentes al funeral, quien solicitó resguardo de su identidad.
Después del mediodía, el sistema de medios públicos informó sobre la muerte de Reyes, de 44 años de edad, que permanecía hospitalizada en el Domingo Luciani, en El Llanito.
Gobierno presente
El presidente electo Nicolás Maduro asistió al funeral en horas de la tarde. Declaró a José Luis Ponce “mártir de la revolución” y reforzó las versiones que involucran a grupos relacionados con la oposición al asesinato del líder comunitario.
Maduro asignó a la urbanización La Limonera el calificativo de “heroica”. “Vengo ahora como presidente de laRepública y siento un gran dolor por la irresponsabilidad de un grupo de fascistas por los cuales hoy un hombre valiente como Ponce ha tenido que rendir su vida”, afirmó.
El primer mandatario pidió que se aceleren las investigaciones para esclarecer los hechos. “Los vehículos de los fascistas que atacaron están identificados. Tenemos que ir por ellos”, dijo.
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