Una pareja de venezolanos afirmó estar destrozada tras la eliminación de a CBP One, el programa que ayudaba a obtener permiso humanitario para entrar a Estados Unidos.
Así lo dijo María Teresa en conversación telefónica con El Pitazo, quien contó que se sentó a llorar en una acera cuando su esposo le dijo que el programa había sido suspendido.
La pareja iba junto a sus dos hijos, de 8 y 9 años, hacia un punto fronterizo en Ciudad Juárez, México. Tenían la cita el 23 de enero.
«Estoy destrozada, nunca pensé que Donald aprobaría esta medida el mismo día que asumiera la Presidencia de Estados Unidos, es una decisión muy drástica», dijo la noche del 20 de enero.
María Teresa es oriunda de Valencia, estado Carabobo. El 10 de agosto de 2024 emigró a Colombia con su familia. Allí estuvo 15 días y luego cruzó la selva del Darién, animada por dos primos que le hablaron del sueño americano. El 25 del mismo mes ya estaba en un refugio en México.
«Nos fuimos después de la elección presidencial, porque el cambio que esperábamos no se dio; además, en el país había mucha persecución poselectoral. Nunca pensamos en emigrar, pero la crisis económica y el miedo a ser detenidos nos obligó. En Venezuela no tenemos la posibilidad de salir adelante y tampoco hay justicia».