Si piensas que el atractivo de una mujer solo se encuentra en su físico, estás muy equivocado. Una buena figura siempre ayuda, pero los aspectos de tu personalidad, tus gestos y tus actitudes pueden llegar a enamorar a un hombre.
La sonrisa: Mirar una mujer risueña causa ternura y simpatía. Pero siempre debes preocuparte de la higiene y limpieza de tus dientes, ya que al sonreír, es en lo que primero se fijan los hombres. Asegúrate que estén alineados y blancos.
Ríe con ganas: Ríete de la manera más natural posible, esto provocará el encantamiento de un hombre. Si interrumpes una conversación con una risa que solo te caracteriza a ti, él estará fascinado. Nunca escondas esa risa, mientras más original, mejor para él.
Sé competitiva: A los hombres no le gustan las mujeres sumisas y débiles. Siempre trata de definir tus metas y trabaja en tu independencia y verás que lograrás ser más feliz contigo misma. Las mujeres luchadoras y trabajadoras que logran sus objetivos, son mucho más atractivas.
Tu intimidad: Nunca le cuentes todo. Es bueno que mantengas tu lado misterioso, pues eso lo mantendrá interesado. Los secretos de una mujer son sagrados. Así que no seas de las chicas que le cuenta todo a su pareja, pues le hará sentir un dominio sobre ti.
Las orejas: Cuesta creerlo pero ellos suelen mirar mucho las orejas. Simplemente les gusta la forma y el sector. Trata de usar el pelo tomado, o ponerlo detrás de las orejas para que resalten.
Tu gusto por la música: Sé auténtica y confiesa que te gusta esa banda que tanto ocultas. Una chica que habla de música siempre es interesante, más si sabes sobre canciones y artistas. Conversa con los chicos sobre esto.
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