La mayoría de las personas acostumbran tomar una taza de café después de la comida, ya sea por gusto o disfrutar mejor de una plática de sobremesa, ¿es esto una buena costumbre?
Como en todo, existen ventajas y desventajas, expertos sugieren que se debe de consumir la taza de café alrededor de unas dos horas después de la comida, una acción que sin duda permitirá que sigamos disfrutando de los beneficios que el café puede brindar al organismo y continuar con este delicioso y divertido hábito.
Con respecto al café, es una costumbre muy extendida consumirlo después de comer, pero su ingesta puede causar nerviosismo y ansiedad, incentivando el consumo de algo dulce cuando la glucemia ya se ha reducido tras la comida por acción de la insulina en el organismo. Por otro lado, puede quitarnos el sueño e impedir el descanso si lo que pensamos hacer es dormir después de comer.
Si no queremos desprendernos de esta costumbre y gozar del efecto antioxidante de estas bebidas sin interferir en la absorción de hierro, debemos consumir la taza de té o café unas dos horas después de la comida, con este simple cambio podremos disfrutar del hábito que muchas veces relaja o es considerado un momento de placer para quienes lo ponen en práctica.
Fuente: http://www.zocalo.com