Si, la victoria de Julianna Peña contra Amanda Nunes nos ha enseñado algo es que, en las MMA, cuanto más grandes vienen, más duro caen, y esta ha sido una lección aprendida a la fuerza por varios luchadores a lo largo de los años.
En las artes marciales mixtas hay un refrán muy conocido: si no tienes una derrota en tu historial, es que no estás luchando con el nivel adecuado de competencia.
Nunes, la primera campeona doble de la historia de la UFC, lo experimentó en carne propia contra Peña el pasado fin de semana en el UFC 269, al ceder sorprendentemente su corona del peso gallo a su desvalida rival en Las Vegas.
Muchos consideran que esta sorpresa es la mayor que se ha visto en el octógono en mucho tiempo, y posiblemente en toda la historia, pero no es ni mucho menos la única conmoción sísmica que se ha producido en las MMA, ya que hay otras que han sacudido el deporte a lo largo de su corta historia.
HOLLY HOLM VS. RONDA ROUSEY – UFC 193, NOVIEMBRE DE 2015
Es posible que los neófitos en MMA no comprendan exactamente lo grande que fue la estrella Ronda Rousey a lo largo de sus cuatro años de imbatibilidad en Strikeforce y la UFC.
La ex judoka olímpica terminó cada una de las victorias de su carrera, todas menos una en el primer asalto, y nueve de ellas por armbar.
Su rápido ascenso a la cima de este deporte trajo consigo una serie de afirmaciones: su boxeo es tan bueno como el de cualquier otro deportista (no lo era), es muy probable que pudiera vencer al campeón masculino de las 135 libras (casi seguro que no), y nunca sentiría el escozor de la derrota mientras siguiera siendo una luchadora en activo.
Esta última afirmación tuvo un final espeluznante en Melbourne (Australia) a finales de 2015, cuando se enfrentó a su compañera invicta y boxeadora profesional Holly Holm, alguien que en los primeros intercambios demostró estar mucho más cómoda en los pies.
El final, cuando llegó como resultado de una estremecedora patada alta de izquierda a la cúpula, fue casi misericordioso, como si sacara a Rousey de su miseria y disipara para siempre la narrativa de que la lucha femenina nunca había visto una campeona tan dominante.
Rousey también perdería su siguiente pelea contra Amanda Nunes antes de emerger en el mundo de la pantomima de la WWE algún tiempo después.
NATE DIAZ VS. CONOR MCGREGOR – UFC 196, MARZO DE 2016
Nate Díaz declaró que no estaba «sorprendido» después de propinarle a Conor McGregor su sorprendente primera derrota en la UFC, apenas unos meses después de que el irlandés hubiera vencido al hombre del saco del peso pluma, José Aldo, para reclamar su primero de los que eventualmente se convertirían en dos títulos mundiales… pero el resto de nosotros sí lo estábamos.
McGregor subió a la división de las 170 libras para enfrentarse a Díaz con poco tiempo de antelación, después de que el campeón de peso ligero Rafael Dos Anjos se retirara de su combate programado debido a una lesión, y se esperaba que superara al duro pero vencible veterano.
En cambio, McGregor se cansó al vaciar su brillante caja de trucos de golpeo y se encontró finalmente envuelto en las arenas movedizas de Díaz, un estrangulamiento por la espalda en el segundo asalto.
McGregor se redimió en agosto del año siguiente, cuando superó a Díaz en un emocionante combate, pero fue el púgil de Stockton el primero en exponer los puntos débiles de la armadura del irlandés hace tantos años.
Fuente: Globovision
