Las garrapatas son artrópodos que parasitan a un elevado número de animales silvestres. También parasitan a los animales domésticos y de forma accidental pueden picar a los humanos. Todas las garrapatas se alimentan de sangre y por las características de su ciclo vital suelen ser vectores de numerosas enfermedades que afectan al hombre, a sus mascotas y al ganado. Algunas garrapatas pueden estar infectadas con una amplia variedad de organismos patógenos, que son transmitidos durante el proceso de ingestión de sangre, junto con su saliva.
Debido a esto, los trabajadores que realizan sus actividades en contacto estrecho con la naturaleza y en zonas de alta prevalencia de algunas de las enfermedades más peligrosas que transmiten las garrapatas, como el Lyme o la encefalitis viral, deben seguir normas básicas de prevención de las picaduras de garrapata, pues es la forma más útil de evitar contagios. Caminar por senderos y evitar atravesar zonas de vegetación densa, llevar manga larga incluso en épocas de calor, ropa de colores claros (es más fácil detectar las garrapatas sobre un fondo blanco que negro) y calzado cerrado son algunas de las medidas más útiles. Además, al llegar a casa es necesario revisar meticulosamente todo el cuerpo (la mayoría de las enfermedades transmitidas por garrapatas requieren que el parásito se adhiera e ingiera sangre durante algunas horas antes de que la persona se infecte, por eso es tan importante quitarla cuanto antes), haciendo especial hincapié en axilas, ingles, corvas y zonas con más humedad y temperatura. Es recomendable también lavar la ropa con agua caliente y dejar secar las botas al sol.
En caso de picadura, se desaconsejan los métodos clásicos como retirar la garrapata con aceite o quemarla, pues facilitan el contagio de los patógenos que pudieran albergar. Por el contrario, se recomienda su retirada mediante pinzas de boca fina, preferentemente por profesionales sanitarios. Si la garrapata sigue viva hay que asegurar una eliminación segura, sumergiéndola en alcohol por ejemplo, para evitar contaminarse, y nunca aplastarla con el dedo. Después de retirar la garrapata, hay que lavar la zona con agua y jabón y, si durante los días siguientes se observa algún cambio en la piel de esa zona o aparecen síntomas como fiebre, es necesario acudir al médico.
A continuación enumeramos algunas de las enfermedades más comunes que transmiten las garrapatas.
Enfermedad de Lyme
La enfermedad de Lyme o borreliosis es la más conocida de las enfermedades transmitidas por garrapatas. Su reservorio habitual se encuentra en ungulados y roedores, y las garrapatas del género Ixodes son su vector al hombre más característico. Es producida por bacterias del género Borrelia.
Sus síntomas son tan diversos que detectar la infección es un desafío que pone en entredicho la cifra real de afectados.
Encefalitis viral
Es también conocida como TBE por sus siglas en inglés (tick-borne encephalitis). La infección, de origen vírico, puede desencadenar una enfermedad neurológica desenfrenada que puede producir inflamación del cerebro, pérdida de memoria y deterioro cognitivo. Los casos están aumentando cada año en Europa central y Rusia.
Fiebre hemorrágica de Crimea-Congo
Otra enfermedad de origen vírico que se considera emergente en países de Europa oriental y es otra de las enfermedades trasmitidas por garrapatas con mayor extensión a nivel mundial. La infección es causada por un virus del género Nairovirus y se ha detectado su circulación en España desde el año 2010.
Tularemia
Una enfermedad de origen bacteriano (Francisella tularensis) de la que son reservorio lagomorfos y roedores. Aunque es poco frecuente en humanos, el contagio se puede producir a través de picaduras de mosquitos y garrapatas. Sus síntomas más frecuentes consisten en la aparición brusca de fiebre alta, malestar general y lesiones en el lugar de inoculación y afectación de ganglios regionales.
Anaplasmosis
La anaplasmosis granulocítica humana es de origen bacteriano con síntomas similares a los de la gripe. Se suele tratar con antibióticos.
Rickettsiosis
Las rickettsiosis son un grupo de zoonosis de distribución mundial causadas por bacterias del género Rickettsias. La fiebre maculosa de las Montañas Rocosas pertenece a este grupo y se transmite a través de la picadura de garrapatas.
Babesiosis
Se trata de un tipo de infección parasitaria por protozoos del género Babesia. Suelen ser vectores las garrapatas del género Ixodes, las mismas que suelen transmitir el Lyme, la anaplasmosis o la TBE.
Fiebre por garrapatas de Colorado
Es una enfermedad viral que se transmite por la especie de garrapata Dermacentor andersoni. Se observa con mayor frecuencia en las montañas del occidente de Estados Unidos y Canadá.
Fuente: Muy Interesante
Por: Maria Laura Espinoza
Twitter: @i_am_LauEz14