El presidente de la Sociedad Venezolana de Nefrología, José Escalona, señaló que el número de pacientes renales que ingresan a programas de diálisis cada vez son más, por descontrol en enfermedades crónicas como diabetes o hipertensión.
Ante esta situación, Escalona señaló que pese al aumento de personas con esta complicación, los centros de diálisis se han reducido y, lo que es peor, en pacientes avanzados casi no se realizan trasplantes en el país caribeño.
“En 2018 había 159 unidades de diálisis en todo el territorio nacional con un promedio de 6.000 pacientes. Actualmente las unidades de diálisis no sobrepasan los 50 centros y cada uno tiene problemáticas particulares”, dijo el nefrólogo.
En una entrevista para el programa Punto y Seguimos de Radio Fe y Alegría Noticias, comentó que “pacientes diabéticos o hipertensos deben estar pendientes de su valor de creatinina. Si está por encima de 1, deben tener su evaluación con el nefrólogo”.
“Paradójicamente, pacientes que llegan a la terapia nunca fueron vistos por un nefrólogo y la mortalidad es sumamente alta en aquellos pacientes que no han llegado a diálisis”, agregó.
Cabe resaltar que en este mes de junio se cumplieron 7 años de la suspensión de trasplantes de órganos en Venezuela. Esta medida que ha dejado a miles de personas dependientes de diálisis en condición crítica.
En la entrevista, el galeno señaló que el Instituto Venezolano de Seguro Social (Ivss) paga a centros privados por atender a los pacientes renales, pero este monto es insuficiente, lo que impide que se hagan mantenimientos adecuados para los equipos de hemodiálisis, pagar gastos operativos y de personal especializado.
Escalona indicó que se necesitan medidas estructurales con instituciones preparadas, personal de salud calificado y con “voluntad política” para que los recursos lleguen y los programas puedan ejecutarse de forma continua.
Con información de Radio Fe y Alegría Noticias