Foto: Héctor Cortez Ruiz
Como cada año, la feligresía merideña se acercó a cada templo para dar inicio a las tradicionales misas de aguinaldo, como víspera de la llegada del nacimiento del Niño Jesús.
Desde las 5:00 de la mañana de este 15 de enero, cada recinto abrió sus puertas para recibir a una congregación llena de devoción, la cual colmó los templos para participar en este ritual que prepara el corazón de la comunidad católica.
En un ambiente palpable de alegría y emoción, los asistentes ofrecieron cantos de alabanza, llenando cada espacio de un espíritu de encuentro y esperanza. La celebración no solo marca el inicio del camino hacia la Navidad, sino que refuerza los lazos comunitarios y la fe compartida.
Esta celebración también conocida como “misa de gallo”, que se realizarán durante nueve días consecutivos previos a la Navidad, simboliza el peregrinaje de José y María hacia Belén.
La Arquidiócesis de Mérida extiende una cordial invitación a todos los fieles y a la comunidad en general a unirse a estas celebraciones, que son un patrimonio vivo de la religiosidad y la cultura popular de la región.









