Un ‘vaporón’ se siente apenas se entra al abasto Bicentenario Sur, en Maracaibo. El sistema de aire acondicionado en la estructura no funciona.
Las neveras donde antes se disponían los pescados y mariscos están dañadas. En su interior pueden verse hileras de envases de refresco.
Las refrigeradoras de las carnes y las hortalizas tampoco funcionan. El área de panadería también está cerrada. A las averías en los equipos se suma la escasez en los anaqueles, ausentes de productos regulados. No hay harina de maíz, ni azúcar, ni leche; tampoco mayonesa, mantequilla, por citar algunos de los rubros ausentes.
Estas imágenes fueron captadas la tarde de ayer miércoles.
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