Con unos 2.000 integrantes en armas o menos, el ELN es la segunda guerrilla del país después de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que desde hace un año adelantan en Cuba con el gobierno un proceso de paz para tratar de poner fin a casi 50 años de confrontaciones entre las partes.
El rebelde Ejército de Liberación Nacional (ELN) insistió el lunes en su intención de iniciar un proceso de negociación con el Gobierno de Colombia y dijo que la Iglesia católica puede jugar un papel clave en la paz del país.
«El ELN tiene la decisión de construir, con el conjunto de la sociedad, unos caminos que lleven a la democratización política, económica, social y cultural del país, esencia de una solución política del conflicto social y armado en Colombia», sostuvo Eliécer Erlinto Chamorro, alias «Antonio García», uno de los miembros del llamado Comando Central o máxima línea de mando del ELN, aseguró AP.
En una entrevista publicada en el diario bogotano El Tiempo, García advirtió, sin embargo, que «desde el inicio del Gobierno (del presidente Juan Manuel) Santos, el ELN manifestó su disposición para establecer conversaciones. Hemos adelantado apenas algunos pasos introductorios, pero este gobierno no ha mostrado una real voluntad de paz».
García enfatizó en la misma entrevista -desde un lugar que no fue especificado- que «desde hace muchos años, más de dos décadas, el ELN ha mantenido disposición para buscar una salida política del conflicto. Hemos establecido conversaciones con cinco gobiernos consecutivos y continuamos firmes en esta decisión».
Sobre la participación de la Iglesia católica en un eventual proceso de paz, el jefe guerrillero observó que la institución «ha estado presente en la mayoría de las iniciativas por construir una solución política en las que el ELN ha participado» y advirtió que ha habido intercambios epistolares entre esa guerrilla y la Conferencia Episcopal de Colombia.
Destacó igualmente como «gratificante escuchar al papa Francisco hablar sobre la paz en Colombia. Sus mensajes en contra de la avaricia, de la guerra, de la pobreza, por la justicia social y contra el capitalismo voraz, dan un nuevo sentido a la vida de las grandes mayorías marginadas y explotadas del mundo».
Con unos 2.000 integrantes en armas o menos, el ELN es la segunda guerrilla del país después de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que desde hace un año adelantan en Cuba con el gobierno un proceso de paz para tratar de poner fin a casi 50 años de confrontaciones entre las partes.
El gobierno del presidente Santos había condicionado el inicio de una eventual negociación con el ELN a la liberación del ciudadano canadiense Gernot Wober, que se concretó el 27 de agosto.
Fuente: Agencias