Más de 8.000 pacientes de 14 servicios del Hospital Vargas esperan por intervención quirúrgica, pero la falta de suministros básicos, como guantes, inyectadoras y gasas, entre otros materiales, impiden el funcionamiento normal del nosocomio desde hace por lo menos 2 meses.
Gabriel Giménez, miembro de la Sociedad Médica del centro asistencial y representante ante el comité de conflictos, informó que después de la protesta realizada el jueves pasado se acordó en asamblea general que sólo atenderán en los próximos días estrictas emergencias y a pacientes recién operados o con historias médicas en ese hospital capitalino.
“A pesar de que hace 2 meses abrieron los nuevos quirófanos inteligentes, no hay guantes, gasas, vendas ni yeso. Estamos prácticamente sin anestesiólogos. Muchos médicos tienen más de un mes sin operar. Hay entre 500 y 600 pacientes en espera por cada uno de los servicios hospitalarios”, dijo.
Ayer hubo una asamblea general con la dirección del hospital, en la que se informó de la solicitud de los recursos correspondientes al segundo trimestre del año al Ministerio de Salud, organismo que presuntamente se comprometió a otorgarlos la próxima semana.
Pese a que El Nacional intentó comunicarse con José Carrillo, director del recinto hospitalario, para confirmar la versión, al cierre de esta edición no había sido posible.
El pasado 8 de abril, a propósito de la apertura de varias áreas remodeladas en el hospital, Carrillo reconoció en entrevista a este diario que había un déficit de 20 anestesiólogos: “Ahora no puedo abrir los 10 quirófanos sino sólo 4, hasta tanto tenga el personal calificado de esa especialidad. Esto se debe a que hay una crisis de anestesiólogos, no sólo en Venezuela sino en el mundo”, afirmó entonces.
PIP. Giménez, especializado en Cirugía Plástica, denunció que cerca de 40 pacientes que requieren la sustitución de las prótesis de la marca PIP están en lista de espera por el déficit de materiales en el nosocomio.
“Esas pacientes son enviadas por el propio Ministerio de Salud, pero no tenemos cómo operarlas. En ocasiones, las pacientes y los médicos hemos tenido que comprar las suturas y las soluciones para poder hacer las intervenciones”, expresó.
Agregó que pacientes con ulceraciones en la piel producto de cáncer, quemadas o que requieren reconstrucción tampoco han podido ser intervenidas por el déficit de materiales y equipos que afronta el hospital.
Fuente_ http://www.el-nacional.com
