En este instante millones de personas se masturban pensando en alguien, viendo la foto de una estrella de cine, el video de una estrella porno. Es posible incluso que en este instante alguien se este masturbando pensando en ti: si cierras los ojos y meditas un poco, sensibilizándote a los flujos de la energía etérica, es posible que lo sientas.
Octavio Paz en “La Llama Doble” decía que en el acto sexual siempre son tres (al menos), la pareja y la fantasía. La fantasía se convierte en un ser en sí mismo hecho de energía psíquica. En el acto masturbatorio análogamente no se está solo, la persona que se masturba crea con su fantasía, en mayor o menor medida, una entidad independiente (una tulpa) la cual en ocasiones incluso puede llegar a afectar el campo electromagnético del objeto del deseo.
El esoterrorista, crítico de cine y mago memético, Aeolus Kephas escribe :
“Cuando una persona fantasía sobre otra persona (sexualmente o no, con o sin auto-estimulacion erótica) dos cosas ocurren”:
1)Empieza a crear intentción, la energía dirigida del deseo, la cual, si se persiste en ella, da lugar a una forma de pensamiento o tulpa hecha de la energía acumulada de ese intento/deseo. Aunque la persona no haya intentado actuar ese deseo, está efectivamente creando un sucedáneo de la realidad donde su fantasía puede volverse real. La persona fantasiada entonnces se vuelve -al menos en potencia- una amenaza activa a esta realidad sucedánea, por razones obvias (cualquier cosa que hagan que contradija su voluntad hará que la realidad falsa se tambalee y colapse). Esto es visto frecuentemente en casos donde los acosadores acaba matando al objeto de sus deseos, como la única forma de mantenerlos “en línea”. También, una vez que una forma de pensamiento está suficientemente energetizada, la persona original que lo inspiró puede ser juzgada como prescindible”.
(Un tulpa es una palabra del sánscrito utilzada en el budismo tibetano para describir un concentrado del pensamiento que toma forma y puede empezar a operar fuera del control de la concienica que lo generó actuando incluso sobre la mente de otras personas u objetos).
2) “La segunda cosa que ocurre, inseparablemente del primer proceso descrito, es que la persona fantasiando está envíando filamentos de energía a la persona en la que fantasía, provocando que ocurra un grado de entrelazamiento -incluso si el objeto no tiene ningún concocimiento de la existencia del ‘fantasista’ (como en el caso de las estrellas de cine y del porno). Una estrella de cine ya se ha abierto y puesto su energía al alcance del mundo entero. En los términos de Castaneda, se han vuelto accesibles, siempre, en todos lados, a todos los que quieran “tenerlas”. Esta es la naturaleza de la fama, al mismo tiempo el precio y la recompensa. Así que cuando una person usa la imagen de una estrella para fantasear, en realidad están asborviendo una parte de la energía de esa estrella (a través de la imagen) hacia la suya. La razón por la cual las estrellas no se drenan y mueren con celeridad, supongo, es que están recibiendo más energía (probablemente mucha más) de la que está haciendo accesible, que les viene de estas fantasías y de la incansable y obsesiva atención”.
Fuente: Avant Sex