Es Gene Robinson, de la Iglesia Episcopal. Actvio defensor de los derechos de los homosexuales en Washington, reveló en una nota su meditada decisión de separarse.
El primer obispo abiertamente homosexual de la Iglesia Episcopaliana, Gene Robinson, cuya elección al frente de la diócesis del estado de New Hampshire hace una década desató una gran polémica, ha anunciado este domingo que se divorciará. (AP)
El obispo Gene Robinson, que hizo historia como el primer prelado abiertamente gay de la Iglesia Episcopal (anglicana), anunció ahora que se divorcia de su esposo.
Robinson, que el año pasado se jubiló como jefe de la Diócesis Episcopal de New Hampshire, reveló su separación conyugal en una nota enviada a otros obispos y con un ensayo publicado en The Daily Beast, donde es columnista.
“Como pueden imaginar, este es un momento difícil para nosotros, no es una decisión tomada a la ligera y sin terapia”, confío en su nota.
Robinson, de 66 años, oriundo de Kentucky y que trabajó durante años como un párroco bien querido en New Hampshire, se convirtió en un pararrayos en 2003, cuando fue elegido obispo. Su elección fue controvertida porque sucedió justo cuando varias organizaciones cristianas veían a la homosexualidad como un pecado, no ordenaban religosos abiertamente gay ni aplaudían el matrimonio entre personas del mismo sexo.
La elección de Robinson provocó una escisión en la Iglesia Episcopal. Y en los diez años que pasaron desde entonces, pocas denominaciones cristianas han cambiado su forma de pensar.
Robinson, que ahora es un alto miembro del Centro para el Progreso Americano en Washington, se ha convertido en un líder defensor de los derechos de los homosexuales y fue invitado por Barack Obama para hablar durante la inauguración de un evento en 2009 y para pronunciar el rezo final en el desayuno de Pascuas en la Casa Blanca, este año.
Casado con una mujer, con quien tuvo dos hijas, Robinson salió del placard en 1986 y se separó. A fines de los 80 conoció durante unas vacaciones en St. Croix a Mark Andrew, quien se convertiría en su novio y luego en su pareja oficial al formalizar su relación con una unión civil en 2008. En 2011, cuando el casamiento entre parejas del mismo sexo se legalizó en New Hampshiere, la unión se convirtió en matrimonio.
La presión pública y las periódicas amenazas hicieron mecha en Robinson, quien en 2006 debió buscar tratamiento por alcoholismo.
Robinson no explicó públicamente los motivos de su divorcio. En su columna del Daily Beast sólo escribió: “los detalles de nuestra situación permanecerán apropiadamente privados”.
(Fuente: The New York Times)
