Un buen sexo mañanero puede ser una gran manera de iniciar la jornada. Aquí, cuatro aspectos que deberías tomar en cuenta para esta grata y productiva experiencia
“Darte un beso de desayuno para irnos volando hasta Neptuno”, canta el malcriado Residente, de Calle 13. ¿No es acaso una gran manera de iniciar la jornada? Es decir, que todo empiece con un beso y que se prolongue con una fogosa sesión de sexo matutino. En tal sentido, ¿qué debería tener en cuenta para que sea una experiencia grata y productiva?
PREPARARSE
El sexo mañanero también requiere ciertos preparativos. De hecho, si usted es de los que alista, la noche anterior, la ropa que uno se va a poner al día siguiente, sabe de lo que estamos hablando. Es decir, sería apropiado que la noche previa usted deje todo listo para el ‘desayuno erótico’. Coma ligero, ponga los preservativos en el velador y, si puede, busque algún producto para el aliento (unos chicles de menta, por ejemplo).
SALTO AL BAÑO
Los detractores del sexo matutino consideran que, a esa hora, el sexo puede ser matapasiones: ambos están despeinados, con un aliento nada atractivo, legañosos. Sin embargo, esto no tiene por qué ser un obstáculo. De hecho, vale la pena vencer la modorra y levantarse de la cama para una rápida labor de aseo. Ir al baño para lavarse la cara y los dientes no le tomará más de cinco minutos.
PONGA LA ALARMA
Según la investigadora sexual Debby Herbenick, una forma de sacar provecho a la mañana, sexualmente hablando, es organizando el tiempo. Recomienda a la pareja poner el despertador para suene unos 15 minutos antes de lo habitual. Este consejo va especialmente para aquellos que, por diversos motivos, tienen que levantarse temprano. Pero, si es un fin de semana y no hay nada que hacer, olvídese del despertador.
CIENTÍFICAMENTE RECOMENDADO
Hacer el amor durante la mañana tiene ventajas. Por ejemplo, hay parejas que no pudieron tener sexo la noche anterior, ya que, digamos, llegaron cansados a casa y con ganas solo de dormir. Asimismo, estudios recientes han demostrado que los niveles de testosterona en el hombre son más elevados durante la mañana. Finalmente, Herbenick considera que el acto íntimo estimula la producción de las hormonas del placer y el bienestar, lo cual influye positivamente en el estado de ánimo del resto del día. Sin duda, una gran manera de arrancar la jornada.
SABÍA QUE
– Tener sexo en la mañana es una divertida forma de quemar calorías. Se estima que, al menos, se pueden gastar de 500 a 1,000 calorías en cada relación.
– Los adultos tienen obligaciones. Por ello, una forma de ganar tiempo, según la sexóloga Debbie Herbenick, es dejar las cosas listas en la noche para el desayuno del día siguiente.
Un estudio realizado en la Universidad Queen’s en Belfast analiza el nivel de melatonina que por las mañanas es muy alto, esta hormona es la hormona del sueño, también se analizó la temperatura del cuerpo que bajó durante la noche, sumado a ésto y pese a que el hombre siempre tiene las hormonas sexuales activas, el nivel de endorfinas femenino alcanza su nivel máximo en las primeras horas de la mañana, entre las 8 y las 10, estas hormonas son las del placer.
Durante el orgasmo aumentan los niveles de estrógeno y otras hormonas relacionadas directamente con el brillo del pelo y la suavidad y calidad de la piel, el sexo embellece. También evita que se produzca endometrosis previniendo el desarrollo de tejido endometrial fuera de la cavidad uterina. Por último y no es para menos en el caso de las mujeres sube el estado de ánimo, dejando un estado anímico muy alto y ayudando a prevenir cuadros de depresión.
Ya tiene rigor científico, el sexo matutino, embellece, nos fortalece, mejora nuestra calidad de vida, nos previene de muchas enfermedades, nos alarga la vida y nos deja un estado de ánimo alto.
El sexo mañanero mejora el funcionamiento de distintos órganos, refuerza las defensas inmunológicas, mejora la circulación y disminuye la presión sanguínea. También permite quemar calorías, reduce el riesgo de padecer diabetes e infarto, fortalece los huesos y músculos y ayuda a aliviar la artritis y la migraña.
La actividad sexual eleva la autoestima, estimula la creatividad, promueve el autoconocimiento y revitaliza. Además, una vida amorosa activa es un magnífico antídoto contra los problemas mentales y existe evidencia de que hay una estrecha relación entre las disfunciones sexuales y los estados depresivos, los cuales se influyen mutuamente y desgastan la relación de pareja.