Este Miércoles Santo los creyentes asisten con fervor a las iglesias a venerar al hijo de Dios
La feligresía católica manifestará nuevamente su fe en El Nazareno Bendito durante la procesión que se realiza este Miércoles Santo durante la Semana Mayor, con el propósito de visualizar el camino que emprendió Jesucristoa El Calvario antes de morir en la cruz.
Esta manifestación religiosa es considera por los creyentes como un momento oportuno para agradecer a Jesús por los favores concedidos. “En la peregrinación de la imagen de Jesús cargando la cruz, la iglesia expresa con la mayor piedad el agradecimiento de lo que hizo el hijo de Dios por nosotros” afirmó el Obispo de Maracay, Monseñor Rafael Conde.
En Venezuela, el Nazareno de San Pablo de la Basílica de Santa Teresa ubicada en Caracas es una de las manifestaciones religiosas más antiguas y veneradas en el país desde el año 1.579, luego sigue El Nazareno de Achaguas en el estado Apure que desde 1.835 se convirtió en el centro de adoración de los llaneros y fue decretado desde hace dos años como Patrimonio de la Nación. Mientras, en Aragua la procesión de El Nazareno suele realizarse con fervor en el centro de la ciudad de Maracay y en Villa de Cura, municipio Zamora.
Lectura del santo evangelio segun san Mateo (26,14-25):
En aquel tiempo, uno de los Doce, llamado Judas Iscariote, a los sumos sacerdotes y les propuso: «¿Qué estáis dispuestos a darme, si os lo entrego?»
Ellos se ajustaron con él en treinta monedas. Y desde entonces andaba buscando ocasión propicia para entregarlo.
El primer día de los Ázimos se acercaron los discípulos a Jesús y le preguntaron: «¿Dónde quieres que te preparemos la cena de Pascua?»
Él contestó: «ld a la ciudad, a casa de Fulano, y decidle: “El Maestro dice: Mi momento está cerca; deseo celebrar la Pascua en tu casa con mis discípulos.”»
Los discípulos cumplieron las instrucciones de Jesús y prepararon la Pascua. Al atardecer se puso a la mesa con los Doce.
Mientras comían dijo: «Os aseguro que uno de vosotros me va a entregar.»
Ellos, consternados, se pusieron a preguntarle uno tras otro: «¿Soy yo acaso, Señor?»
Él respondió: «El que ha mojado en la misma fuente que yo, ése me va a entregar. El Hijo del hombre se va, como está escrito de él; pero, ¡ay del que va a entregar al Hijo del hombre!; más le valdría no haber nacido.»
Entonces preguntó Judas, el que lo iba a entregar: «¿Soy yo acaso, Maestro?»
Él respondió: «Tú lo has dicho.»
Palabra del Señor
