Con la abstención en 45,9%, los colombianos votaron y sorprendieron a medio mundo con su escogencia. Dejaron fuera de la segunda vuelta a Federico Gutiérrez y en cambio empujaron a Rodolfo Hernández para que se mida con Gustavo Petro el 19 de junio. Tienen ahora que decidir entre un izquierdista exguerrillero o un empresario populista.
Los colombianos no se dejaron convencer sobre el peligro que representa Petro, con sus simpatías por Hugo Chávez y su pasado subversivo. Es evidente que están cansados del uribismo y de la derecha, como se evidenció en las protestas de 2021, de las que se dijo en aquella oportunidad que estaban organizadas por chavistas.
Sin embargo, la sorpresa la dio Hernández, que obtuvo 28% de los votos el domingo. Este empresario fue alcalde de Bucaramanga, en el oriente del país, lo acusan de misógino y de xenófobo por declaraciones que ha dado sobre las migrantes venezolanas. Lleva la marca de candidato anti status quo que posiblemente lo hizo muy atractivo para los colombianos que están cansados de los políticos tradicionales. Es lo que ha estado sucediendo en el mundo últimamente.
Hernández no tiene respaldo de ningún partido, es “independiente”. Ha hecho promesas de acabar con la corrupción, de reducir el gasto público y la burocracia e incluso eliminar algunas secretarías (ministerios) como la de la mujer. Todas estas acciones para ahorrar dinero, pues dice que Colombia gasta demasiado en cosas que no necesita, como los carros con choferes de los congresistas.
Frente a eso está Petro bien plantado con 40% de los votos obtenidos el domingo. Pero Fico Gutiérrez ya anunció su respaldo a Hernández. Los que se oponen al guerrillero tienen la esperanza de derrotarlo con la suma de votos de la derecha.
El domingo los colombianos votaron por lo “menos malo” de la lista de candidatos, en clara respuesta al aspirante promovido por Álvaro Uribe, que ha perdido prestigio por los procesos judiciales que enfrenta.
Sin embargo, la comunidad internacional espera con preocupación el desenlace definitivo de las elecciones colombianas porque muchos ven en Petro un segundo Chávez. ¿Y del populismo y la visión nacionalista de Hernández? Hay muchas cosas que en este candidato batacazo hacen resonancia en los venezolanos.
Ojalá que el 19 de junio no apliquen el dicho de más vale malo conocido que bueno por conocer. De todas maneras, y cualquiera sea el caso, desde este lado de la frontera esperamos que sean lo suficientemente inteligentes para no dejarse robar las instituciones que pueden hacerle contrapeso a la Presidencia. Deben evitar a toda costa que Colombia se vuelva otra tragedia como la venezolana.