Con las dos Cámaras del Congreso en manos del Partido Republicano, el presidente de Estados Unidos tendrá un panorama adverso para impulsar sus principales reformas
Las elecciones legislativas de este martes en Estados Unidos significaron el cambio político más dramático desde que el presidente Barack Obama llegó a la Casa Blanca, luego de que el Partido Republicano quedara con el poder de las dos Cámaras del Congreso.
Con la derrota, el mandatario seguirá los pasos de todos sus antecesores desde Ronald Reagan, enfrentados a la oposición de todo el Congreso al final de sus mandatos.
A falta de dos años para la finalización de su mandato, este panorama adverso podría forzar al jefe de Estado norteamericano a hacer más concesiones con sus opositores republicanos.
Aunque hayan conseguido el poder en ambas Cámaras, los republicanos buscan volver a la Casa Blanca en 2016. Para eso, deberán llevar confianza al pueblo estadounidense luego de haber conducido a un cierre temporal del Gobierno federal en una disputa por el presupuesto.
TED CRUZ: «FUE UN FUERTE REPUDIO PARA LA AGENDA DE OBAMA»El Partido Republicano también deberá trabajar estos dos años para superar la notoria división dentro del bloque entre los conservadores del Tea Party y el ala más menos radical.
Frente a este nuevo escenario político, habrá que ver si los más conservadores, como el senador Ted Cruz, tenderán lazos con los demócratas.
Mitch McConnell, el líder de los republicanos en el Senado, quien obtuvo la reelección en Kentucky (centro-este) tras una difícil campaña, subrayó que probablemente no promulgaría leyes para demoler las bases de la presidencia de Obama, empezando por el sistema de salud.
Durante su gestión, el presidente demócrata no logró sacar adelante importantes leyes, como por ejemplo la ley inmigratoria que mantenía esperanzada a la gran población latina que hay en Estados Unidos.
También hubo una fuerte resistencia por parte de los republicanos a la reforma del sistema de salud, más conocido como «Obamacare».
Sin embargo, con relación a estos temas, a los cuales también se puede sumar el cambio climático, es probable que el presidente de los Estados Unidos continúe tomando acciones por su cuenta. A finales del año, se espera que anuncie una acción ejecutiva para aplazar deportaciones para algunos inmigrantes indocumentados.
Jay Carney, el ex portavoz de Obama, dijo que espera que Obama cree un «empuje total» en sus prioridades, independientemente de la composición del Congreso.
La fuerte derrota electoral de los demócratas en las elecciones legislativas tuvo un fuerte impacto del voto castigo hacia la gestión de Obama. Incluso las encuestas de boca de urna mostraban un electorado desencantado: dos tercios estimaron que el país marcha en una dirección equivocada, y 79 por ciento desaprueba la labor del Congreso. Menos de un tercio se siente satisfecho con el gobierno de Obama, y una cifra similar con los líderes republicanos en el Capitolio, según CNN.
«Esta fue una noche espectacular para los republicanos. Fue un fuerte repudio para la agenda de Obama, y la economía de Obama, que no está funcionando», aseguró el senador republicano Ted Cruz a la cadena de televisión CNN.
Fuente: Agencia