El cineasta y opositor iraní Jafar Panahi, detenido la semana pasada en Teherán, debe cumplir una pena de seis años de prisión, según un fallo de 2010, anunció el martes la autoridad judicial iraní.
Panahi, uno de los cineastas iraníes más galardonado, «fue condenado en 2010 a seis años de prisión (…) y fue trasladado al centro de detención de Evin para purgar su pena», indicó el vocero de la institución judicial iraní, Masud Setayeshi, en una rueda de prensa.
El director de cine, de 62 años de edad, obtuvo un León de Oro en Venecia en 2000 por El círculo y el premio al mejor guión en Cannes en 2018 por Tres caras. Tres años después, logró el Oso de Oro de Berlín por Taxi Teherán.
El cineasta fue declarado culpable por «propaganda contra el régimen» por apoyar las protestas de 2009 contra la reelección del ultraconservador Mahmud Ahmadineyad como presidente de la República Islámica.
Detenido durante dos meses en 2010, Panahi ha estado bajo libertad condicional que podía ser revocada en cualquier momento.
El pasado 11 de julio, Panahi fue arrestado a su llegada al tribunal de Teherán cuando iba a comparecer en el caso de otro director de cine también galardonado, Mohammad Rasulof. Este último fue detenido el 8 de julio junto a su compañero Mostafa Aleahmad.
Los cineastas habían denunciado a mediados de mayo en una carta abierta el arresto de varios de sus colegas por parte de las autoridades y la represión contra los manifestantes en Irán.
Serie de arrestos
A pesar de las presiones políticas, Irán ha estado acorralando a la industria cinematográfica y los ganadores de premios de los principales festivales internacionales.
La detención de Panahi provocó la condena de otros cineastas. Los organizadores del certamen de Cannes declararon que condenan con firmeza los arrestos, así como «la ola de represión llevada a cabo por Irán contra sus artistas».
Por su parte, el Festival de Cine de Venecia pidió la «liberación inmediata» de los directores de cine, mientras que el de Berlín indicó sentirse «consternado e indignado» por la detención.
El viernes, el Ministerio de Exteriores de Francia denunció un fenómeno que ilustra «el inquietante deterioro de la situación de los artistas en Irán».
Las autoridades iraníes han realizado últimamente numerosas detenciones, incluida una figura del movimiento reformador, Mostafa Tajzadeh.
Tajzadeh se encuentra en la actualidad en prisión preventiva en el centro penitenciario de Evin bajo la acusación de reunirse, intención de actuar contra la seguridad del Estado y propaganda contra el sistema, dijo este martes Setayeshi.
El político, que tuvo una tentativa fallida de presentarse a las presidenciales del pasado año, fue detenido en 2009 durante las manifestaciones contra Ahmadineyad.
Tajzadeh, que ha hecho campaña durante mucho tiempo por cambios estructurales y democráticos en la República Islámica, fue condenado en 2010 por cargos de perjudicar la seguridad nacional. En 2016, recuperó la libertad tras cumplir su sentencia.
Antes, ocupó la función de viceministro de Interior durante el mandato de 1997-2005 del expresidente reformista Mohammad Khatami.
EFE
