Primero oímos hablar a las estrellas del cine mudo, luego las vimos pasar del blanco y negro al color y acabaron cobrando nueva vida al saltar de la pantalla gracias a las películas en 3D.
Ahora, con la feroz competencia que las películas enfrentan por parte de otras formas de entretenimiento, la industria cinematográfica está tratando de implantar una nueva tecnología para dar a los espectadores un motivo adicional para seguir acudiendo a las salas de exhibición: el cine en 4D.
¿Y en qué consiste ese sistema con el que prometen ofrecer al público una experiencia única de «inmersión total»?
Pues en hacer que durante las proyecciones -habitualmente de películas de acción- los asientos se muevan frenéticamente de forma sincronizada con lo que está sucediendo en la pantalla mientras se disfruta de diversos efectos como niebla, lluvia, viento u olores.
Hace unos años que el 4D se puede experimentar en sus diferentes versiones en algunos parques de atracciones.
Desde 2009 la empresa surcoreana CJ 4DPlex lo ha ido implantando bajo el nombre de 4DX en más de 100 cines de una veintena de países, entre ellos varios latinoamericanos como México, Brasil o Perú.
BBC Mundo.