La deuda de Cadivi con El Carabobeño alcanza los 877 mil dólares, necesarios para cancelar el papel periódico que se acaba en abril. “Estamos cerca del límite de inventario”, justificó Daniel Alemán, adjunto a la dirección del Diario del Centro.
La decisión no fue fácil. El problema que afecta a El Carabobeño y a decenas de diarios del país, obligó a la drástica decisión de disminuir ocho páginas en la edición diaria, y pasar a la impresión de dos cuerpos, por primera vez en tres años. “Nos están acabando”.
El Carabobeño inició las gestiones para la importación de papel en abril de 2013. Se solicitó autorización para importar y tanto el Ministerio de Industrias, como Cadivi, dieron el visto bueno a las peticiones. Fueron aprobadas las autorizaciones para la Adquisición de Divisas (AAD), narró Alemán. Se contactó al proveedor y llegó la mercancía, por lo que la solicitud para la Liquidación de las divisas (ALD) se hizo mucho antes de los 6 meses que otorga la ley. “Aún estamos a la espera de que el Gobierno nos liquide las divisas con las cuales pagaremos la mercancía que estamos consumiendo, esa que se nos acaba en abril.”
La consecuencia inmediata fue la suspensión del crédito por parte de los proveedores. Cadivi nos adeuda la liquidación de más de 800 mil dólares para pagar el papel. “Estamos llegando al límite de existencia y eso nos obliga a sacrificar información importante y trascendental para nuestros lectores”
La decisión de disminuir el número de páginas que circulará nos permitirá extender el inventario hasta junio, detalló el directivo. Pero la preocupación es que si quisiéramos tramitar nuevas solicitudes para la importación, no podríamos hacerlo porque los proveedores, que tienen 40 años trabajando con nosotros, no nos suministrarán las facturas proformas para iniciar el proceso, pues a ellos no les interesan los procesos que tienen que hacer las empresas venezolanas para adquirir divisas, necesitan su pago. “Hemos enviado comunicaciones a Cadivi, sin obtener respuesta, pero seguiremos agotando las instancias nacionales para solventar la situación”
El Carabobeño tiene cerca de 400 trabajadores directos y unos 300 indirectos. “Si no tenemos papel para circular, esos puestos entrarían en riesgo. Aunque nuestra web es muy visitada, no sería suficiente para generar los ingresos que se necesitan para mantener una infraestructura como la de El Carabobeño, con tanto personal y modernas instalaciones”
Por ahora, la única medida tomada es la disminución del número de páginas y de algunas ediciones especiales. Daniel Alemán esbozó de la posibilidad de revisar algunas publicaciones dominicales, de persistir el problema, pero aclaró que el tiraje del impreso se mantendrá.
Carabobeño
