Las autoridades de Arabia Saudí decapitaron hoy a un ciudadano del país, condenado por asesinar a un agente de la lucha antidroga, informó el Ministerio del Interior.
En un comunicado, difundido por la agencia de noticias saudí, SPA, el ministerio explicó que Aed Al Yahdali fue ejecutado con una espada por matar con un arma de fuego a Ahmed al Jeiri, miembro del Departamento Antidrogas.
El condenado perpetró el crimen cuando el agente intentó detenerlo por traficar y consumir drogas y bebidas alcohólicas, según la nota.
La decapitación de Al Yahdali fue cumplida en la provincia de Al Liz, situada en la región de La Meca, en el oeste del país.
Esta ejecución se produce después de que ayer, tres ciudadanos iraníes fueran también decapitados en la región de Al Sharquiya (Oriental) por contrabando de drogas vía marítima.
Las condenas a muerte de la corte de primera instancia son en su mayoría confirmadas posteriormente por los Tribunales de Apelación y el Supremo, y la orden final es dada mediante un decreto real (emitido por el rey saudí, Salman bin Abdelaziz).
Este tipo de ejecuciones se aplican en Arabia Saudí en virtud de una estricta interpretación de la «sharía» (ley islámica), que consiste en decapitar al acusado con golpes de espada.
En Arabia Saudí se condena a muerte a las personas encontradas culpables de asesinato, violación, narcotráfico, brujería y homosexualidad.
Desde comienzos de este año, las autoridades saudíes han ejecutado a 140 personas, según los últimos datos de Amnistía Internacional, una cifra muy superior a las 88 ejecuciones registradas en 2014.
EFE