La madre del estadounidense Alan Gross, condenado por espionaje en Cuba, falleció este miércoles a los 92 años de edad, y Washington pidió un gesto humanitario para que el contratista preso pueda participar de los funerales.
La portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki, dijo que Washington pidió «al gobierno cubano que otorgue al señor Gross un permiso humanitario para que pueda viajar a Estados Unidos y estar con su familia en este momento de duelo».
Psaki no dio detalles sobre si Washington ofreció algún tipo de garantías de que Gross retornaría a Cuba para cumplir el resto de su sentencia de 15 años por contrabandear a ese país equipos de espionaje.
Los abogados de Gross informaron este miércoles a la AFP que «el último deseo de Evelyn Gross era ver a su hijo antes de morir. Funcionarios cubanos negaron a Alan un permiso humanitario para visitar a su madre».
En una nota, la esposa de Gross, Judy, expresó que se trata de «un golpe devastador para Alan y su familia». «Estoy preocupada de que Alan abandone toda esperanza de retornar a casa y haga algo drástico», señaló.
Judy Gross añadió que «con seguridad debe haber algo que el presidente (Barack) Obama pueda hacer para garantizar la liberación inmediata de Alan».
De acuerdo con Psaki, el hecho de que Gross no haya podido visitar a su madre con anterioridad fue «una tragedia». La portavoz añadió que un permiso para que visite a su familia «en este período de duelo» sería «un gesto que deberían asegurar» las autoridades de la isla.
Gross había pedido a las autoridades cubanas en mayo de 2012 un permiso para viajar a Estados Unidos y ver a su madre, entonces ya gravemente enferma de cáncer, y luego retornar a Cuba y cumplir el resto de su condena.
Sin embargo, las autoridades cubanas negaron el pedido alegando que Gross se encontraba apenas en el inicio de la condena y no tenía derecho a ese beneficio.
Este miércoles, una alta funcionaria de la cancillería cubana, Josefina Vidal, apuntó en una nota oficial que el contratista no pudo viajar porque «ni el sistema penitenciario cubano ni el norteamericano contemplan la posibilidad de que los sancionados internos viajen al exterior, cualesquiera que sean los motivos que se aleguen».
– Cuba insiste en negociar –
El gobierno de Obama pide la liberación inmediata y sin condiciones de Gross, detenido en La Habana en diciembre de 2009 y condenado en marzo de 2011, y quien afirma que no cometió ningún delito.
En contrapartida, el gobierno cubano ha propuesto en reiteradas oportunidades establecer un diálogo bilateral de alto nivel para tratar sin precondiciones una salida a la situación de Gross «en un escenario de reciprocidad».
En este caso, Cuba busca obtener la liberación de tres agentes, de un grupo original de cinco, que fueron condenados por espionaje y cumplen pena en cárceles estadounidenses.
Sin embargo, el gobierno estadounidense descartó por el momento cualquier posibilidad de realizar un canje de Gross por los tres agentes cubanos.
Fuente: ÚN
