El gobierno de Estados Unidos anunció este martes (27.07.2021) la suspensión temporal de su cooperación con la Fiscalía General de Guatemala después de que el principal fiscal anticorrupción de esa nación, Juan Francisco Sandoval, fuera destituido, una medida que ya había sido condenada por Washington, y huyera del país temiendo por su seguridad.
La administración del presidente Joe Biden, que considera la lucha contra la corrupción como una prioridad clave, dijo que la destitución del fiscal Sandoval mostró una falta de «buena fe» por parte de la fiscal general Consuelo Porras, jefa del ministerio público guatemalteco. «Como resultado, hemos perdido la confianza en la fiscal general», dijo la portavoz adjunta del Departamento de Estado, Jalina Porter.
«El gobierno de Estados Unidos está pausando temporalmente la cooperación programática con el ministerio público mientras realizamos una revisión de nuestra asistencia a las actividades que dirige la fiscal general», agregó. Porter subrayó que el gobierno estadounidense está «observando de cerca acciones adicionales que puedan socavar el estado de derecho o la independencia judicial en Guatemala”.
Corrupción y migración, de la mano
Sandoval, galardonado a principios de este año por el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, por sus campañas anticorrupción, lideraba la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI). Sandoval dijo que había encontrado muchos obstáculos en su trabajo y que le dijeron que no investigara al presidente Alejandro Giammattei sin el consentimiento de la fiscal general.
Por ello, la vocera Porter sostuvo que la destitución de Sandoval forma parte de un «patrón de comportamiento» e indica «una falta de compromiso con el Estado de derecho y los procesos judiciales y fiscales independientes».
La administración Biden considera que la corrupción es un factor que impulsa la migración irregular hacia EE.UU., un fenómeno que se ha agudizado en los últimos meses con la llegada a la frontera sur del país de cientos de miles de guatemaltecos. Porter recordó que Washington ha dejado claro que la lucha contra la corrupción es «esencial» para «fortalecer el Estado de derecho, aumentar las oportunidades económicas, y abordar las causas fundamentales de la migración irregular».
dw