La economía de Estados Unidos creció a un ritmo anual del 3,2 % en el primer trimestre de 2019, un dato que rebasó las expectativas de los analistas y que permitió al presidente, Donald Trump, sacar pecho ante las advertencias del FMI y otras voces sobre los riesgos de su política comercial.
El primer cálculo provisional del Producto Interior Bruto (PIB) entre enero y marzo, anunciado hoy viernes por el Departamento de Comercio, reveló un crecimiento casi un punto superior a lo previsto por los expertos y que supone un notable avance respecto al último trimestre de 2018, cuando la economía creció el 2,2 por ciento.
EFE