La costumbre de disfrazarse la noche del 31 de octubre y recorrer el vecindariopara tocar puertas en búsqueda de caramelos es bastante nueva en los países de Latinoamérica. La festividad de Halloween se asocia, en realidad, con los Estados Unidos, país donde se originaron muchas de estas tradiciones que luego se difundieron mediante productos culturales masivos como películas y series de televisión.
Sin embargo, si vamos a los hechos, Halloween no es una festividad estrictamente estadounidense y tiene sus raíces en varias celebraciones europeas. La tradición de disfrazarse para pedir dulces, aparentemente, también podría tener sus orígenes en el viejo continente.
Orígenes británicos
Los historiadores no tienen un consenso sobre las raíces de estas costumbres, aunque sí hay un par de teorías que predominan. La primera, es que la tradición de salir a pedir caramelos estaría inspirada en tradiciones de la Edad Media en las islas británicas.
La festividad de Halloween, parece, estaría relacionada con la festividad celta de Samhain que se correspondía con el final del invierno y el comienzo del verano. Cuando se introdujo el cristianismo a estas culturas, se intentó sustituir estas celebraciones «paganas» por otras más cercanas a la nueva religión. Fue así que surgió la llamada «Hallowmas» que eventualmente daría lugar a lo que hoy conocemos como Halloween.
En la Edad Media, se instauró durante estas celebraciones una práctica llamadasouling. Esta consistía en personas llamadas soulers (principalmente niños y adultos jóvenes) que recorrían las calles intercambiando plegarias para las almas (souls) de los muertos por dinero o alimentos.
Otra teoría es que el origen es un poco más reciente: del siglo XIX. Fue entonces que en Escocia surgió la costumbre de recorrer casas pidiendo también dinero o alimentos pero esta vez no a cambio de plegarias sino a cambios de realizar alguna gracia, como contar un chiste.
¿Sabes quién soy?
Por otro lado, otros expertos sugieren que el origen del «dulce o treta» sería incluso más reciente y no provendría de las islas británicas. Estas teorías sugieren que la tradición se originó en los mismos Estados Unidos, entre comunidades alemanas que se inspiraron en costumbres de su país de origen.
En lugar de pedir dulces en octubre, sin embargo, esta práctica sucedía cerca de la Navidad y consistía en que los niños se disfrazaran y los adultos intentaran identificar de quién se trataba. En algunos casos, se daba «premios» a los niños que lograban engañar a sus vecinos y de allí habría surgido esta práctica.
Sea cual sea la realidad, durante el siglo XX y habiendo superado las restricciones de azúcar de la Segunda Guerra Mundial, esta práctica ganó popularidad rápidamente en los Estados Unidos. En la actualidad, la tradición se extiende cada vez más a lo largo y ancho del planeta gracias a la gran influencia cultural de este país norteamericano.
Además, seamos sinceros, una festividad que nos invita a disfrazarnos y comer dulces es demasiado divertida como para dejarla pasar.
¿Piensas celebrarla este año?
Curiosidades.batanga.com