La ACNUR denunció que los menores de edad también son obligados a regresar al país para combatir o trabajar para ayudar a sus familias. Hay más de 500 mil chicos desplazados en el Líbano, Jordania, Turquía e Irak
Los niños sirios refugiados no reciben la suficiente protección y muchos de ellos se ven obligados a trabajar y a contraer matrimonio, pese a su edad, o son víctimas de ataques sexuales, mientras que otros son forzados a regresar a su país para combatir.
Así lo denunció, este martes, en Ginebra, la vocera del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), Melissa Fleming, quien hizo también una autocrítica del accionar de la agencia de las Naciones Unidas en el Líbano y Jordania.
“El informe señala que se podrían tomar más medidas para que los menores no se vean expuestos» ante esos desafíos, sostuvo Fleming. «La gente está simplemente desesperada y empobrecida», explicó.
El reporte indica, a su vez, que la delincuencia en Zaatri, el principal campamento de refugiados en Jordania y donde hay 130 mil niños, ha aumentado a niveles tales que los refugiados quieren escapar de allí.
Los niños sirios viven un verdadero drama tanto fuera como dentro de su país. Un reciente informe de Unicef señala que más de 8 mil menores de edad han muerto en el marco de la crisis en el país y ante la creciente represión del régimen de Bashar Al Assad.
Unos 500 mil niños se han visto desplazados de Siria junto con sus familias y se han refugiado en otros países, como el Líbano, Jordania, Irak y Turquía, para mantenerse a salvo de las bombas diarias que caen sobre las ciudades.
Alrededor de 1,8 millones de niños continúan en el país. Estos viven con terror cada día, con bombardeos que se han cobrado hogares enteros, hombres armados que circulan por las calles y tanques amenazantes.
El conflicto en el país ya se ha cobrado, en total, más de 100 mil víctimas fatales, miles de heridos y decenas de ciudades destruidas por completo.
Fuente: InfoBae
