Ni en los Supercampeones se veía derroche de futbol como éste.Exagerado como suele ser el entretenimiento nipón, puso a prueba a dos jugadores de la selección japonesa de fútbol, quienes dieron muestras de lo que presentarán en el próximo Mundial de Fútbol al enfrentarse contra 55 niños, esto durante la transmisión de un programa de televisión de su tierra natal.
Los profesionales Shinji Kagawa, del Manchester United, y Hiroshi Kiyotake, del Nuremberg, comenzaron midiéndose con 33 chamaquitos de ojo rasgado, pero como de inmediato les metieron un soberbio gol, los productores decidieron meter a la cancha a otros 22 niños, que si bien no daban muestras de saber patear el balón, bien que estorbaban.
Consiguieron otro tanto los émulos de Oliver y Tom… descúbranlo en este vídeo amenizado por los comentarios del Martinoli del país del sol naciente:
