Las elecciones en Venezuela tienden a dividir familias, amigos, y comunidades. Sin embargo en Caricuao, hay un ejemplo de convivencia. En el edificio 8 de la UD5 de esa urbanización popular de Caracas, los vecinos que habitan 156 apartamentos, manifiestan abiertamente su inclinación política relata Oscar Albornoz, uno de los habitantes.
En el edificio los afiches de los candidatos Nicolás Maduro y Henrique Capriles Radonski, e incluso del fallecido presidente Hugo Chávez, se intercalan de balcón en balcón. En el piso 5 se despliega una gran bandera que dice entre el tricolor: Venezuela somos todos.
«Si a alguien le pasa algo en el edificio, no llamamos a Capriles o a Maduro, llamamos al vecino que es nuestro amigo, por eso convivimos con una sana rivalidad», comentó Albornoz.
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