Las distorsiones existentes en el mercado cambiario se reflejan en los precios y vemos como, a pesar de la caída abrupta de la cotización en el mercado negro de divisas, lo que los consumidores pagan, por los bienes y servicios no refleja ninguna variación.
Agentes del mercado de divisas refieren que los grandes compradores, empresas nacionales consolidadas y transnacionales, se encuentran con muy poca actividad debido a que se reservan los bolívares para cumplir con las obligaciones de tributarias del momento, es decir el Impuesto Sobre la Renta.
El dólar negro presenta variación negativa superior al 35%, en menos de 20 días, lo que resulta muy brusco para solo estar vinculado al tema de la declaración del Islr.
Si bien es cierto que la necesidad de bolívares estacionalmente es más alta en el mes de marzo por las obligaciones tributarias, las empresas grandes hacen su programación con suficiente tiempo como para que las tome por sorpresa esta coyuntura.
En el movimiento acelerado del dólar alternativo hay un alto componente especulativo en donde agentes del mercado se aprovechan de situaciones puntuales para sacar partido.
El Ministro de Comercio Exterior; Jesús Faría ha señalado “ese dólar sube, baja o se estanca, pero los precios solo reconocen un movimiento que es el movimiento ascendente”.
El Mundo
Por Confirmado: Gabriella Garcés