El Ministerio de Finanzas avanza en el diseño de un esquema para reducir y cancelar parte de la deuda que tienen empresas venezolanas con compañías en el extranjero, producto del atraso de Cadivi en la aprobación de dólares al tipo de cambio oficial.
El Ministerio de Finanzas negocia con Bank of America una transacción que implica que esta entidad bancaria contacte a empresas domiciliadas en el exterior que vendieron productos o servicios a compañías venezolanas y aún no los han cobrado. Si aceptan un descuento en el monto, se les cancelaría en poco tiempo.
El dinero para el pago provendría del Banco Central de Venezuela que aportaría hasta 3 mil millones de dólares.
De concretarse la transacción el Gobierno lograría un descuento en la suma que debe y Bank of America obtendría una comisión de 1,25% sobre el monto original que hubiese tenido que ser cancelado.
Al mismo tiempo las empresas en el exterior logran un pago que han estado esperando por largo tiempo y si bien tienen que aceptar un descuento hay que considerar que la deuda está calculada a un tipo de cambio de 6,30 bolívares por dólar que, de acuerdo con la mayoría de los analistas, tiene los días contados porque el Gobierno devaluará el próximo año.
La República determinará las operaciones que considere prioritarias y para formar parte del programa se requiere que la deuda haya sido reconocida por Cadivi y que la empresa venezolana cancele los bolívares correspondientes a las divisas en un banco nacional.
Para las empresas venezolanas no hay descuento alguno, es decir, tienen que pagar los bolívares correspondientes al 100% de los dólares que deben.
El programa tendría una duración de un año pero en los términos en diseño Bank of America coloca una cláusula que le permite culminar el trato anticipadamente si la República no cumple con cualquier compromiso por vencimiento de deuda externa de al menos 100 millones de dólares; o si ocurren modificaciones de normas que hagan imposible seguir adelante con el esquema.
La deuda con empresas en el exterior incluye distintas áreas. Según declaraciones del presidente de la Asociación de Líneas Aéreas, Humberto Figuera, en julio de este año, las obligaciones pendientes de Cadivi con el sector se ubicaba en 1.400 millones de dólares, mientras que con las empresarios de la zona franca de Colón, en Panamá, se calculan otros 300 millones de dólares.
En un entorno donde Pdvsa solo le entrega al Banco Central la mitad de los petrodólares, vende barriles a descuento y las importaciones se han disparado por un tipo de cambio artificialmente barato las reservas liquidas, es decir, los dólares en efectivo que tiene el Banco Central para cubrir los pagos de importaciones y vencimientos de deuda registran una constante caída durante este año.
De acuerdo con Síntesis Financiera, al cierre del 14 de noviembre, la porción líquida de las reservas es de 718 millones de dólares, una cifra mínima que representa menos de una semana de importaciones y no permite mantener las obligaciones al día.
Aparte de la porción en efectivo las reservas internacionales están compuestas de oro y bonos. Para aumentar los dólares en efectivo el Gobierno contempla otra operación que consiste en entregar como garantía las barras de oro que aún están depositadas en el exterior y que al cierre de junio tenían un valor en el mercado de 2 mil 600 millones de dólares a cambio de un crédito por un monto similar.
Las reservas internacionales del país están altamente concentradas en oro al punto que los 11,8 millones de onzas troy que administra el Banco Central representan 7 de cada 10 dólares en reservas.
La ingeniería financiera no se limita al tema de las reservas. La semana pasada Pdvsa concretó una operación en la que hizo un canje de deuda, cambiando obligaciones a corto plazo en bolívares por pasivos a largo plazo en dólares.
Contratistas recibieron bonos que vencen en 2026 y podrán vender en el exterior para obtener las divisas.
Fuente: El Universal