Diputados de la Asamblea Nacional legítima, exigen un plan de vacunación con carácter de urgencia, equidad y universalidad y condenan la política de exclusión del régimen de sólo vacunar a las personas que tengan el Carnet de la Patria y los que están es las listas del programa de cajas Clap.
Así se desprende del debate sobre la violación del derecho a la salud en el marco de la ausencia de un plan de vacunación masiva contra el virus COVID-19, celebrado durante la sesión de la Comisión Delegada de este martes, vía zoom.
Inició el debate la Diputada por el estado, Aragua Dinorah Figuera, quien condenó que en el país no exista un plan de vacunación contra el COVID-19, pese al reclamo reiterado de los organismos de salud académicas, sociales, del pueblo en general y de la Asamblea Nacional legítima. “Estas exigencias no han tenido eco en el régimen de Maduro, todo lo contrario, solo están siendo inmunizada la población que esté en la lista del programa de las cajas clap o tengan el carnet de la patria”, afirmó la diputada Figuera.
Sostuvo que esta Asamblea Nacional legítima debe apoyar la iniciativa promovida por las Academias de la Medicina, y de Ciencias, todo el sector salud y las ONGs, de dirigirse, a través de una misiva, a la Alta Comisionada de los Derechos Humanos Michelle Bachelet, donde manifiestan con preocupación, la ausencia de información, la exclusión de personal de salud, de personas que no están inscritas en el sistema patria y un plan serio de vacunación masiva, contra el COVID-19.
“Solicitan la intervención de la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas y la OMS para que se respeten los derechos humanos del pueblo de Venezuela y se apruebe y divulgue, con carácter de urgencia, un plan de vacunación oficial contra el COVID-19 y se cumplan definitivamente la meta nacional de vacunación consistente en 22 millones 820 mil personas”, apuntó la parlamentaria.
Plan diabólico
Mientras que la diputada por el estado Lara, Ana Salas, deploró y calificó de una acción diabólica del régimen y su entorno el manejo para enfrentar la pandemia del COVD-19, las cifras de muertos y contagiados que se señalan no son las reales y el plan de vacunación está dirigido a la población que tiene el carnet de la patria, mientras los médicos y trabajadores de la salud no tienen protección.
“El anuncio del plan de vacunación es diabólico y macabro dispuesto a crear más zozobra y desesperanza en un pueblo, que padece esta terrible pandemia. Es una burla al pueblo y en especial a nuestros adultos mayores. Es un derecho que todos tengamos acceso a las vacunas. Por culpa del régimen Venezuela se mantiene en los últimos puestos de América latina en inmunización contra el COVID-19 y hasta la fecha se desconoce la cantidad real de vacunas que han llegado al país, porque las informaciones del régimen son contradictorias”.
Exigió que entre al país todas las vacunas necesarias y se elabore un verdadero plan de vacunación masiva inclusivo y oportuno para todos los venezolanos, sin exclusión, como un derecho prioritario en estos tiempos de pandemia.
Genocidio silencioso
Por último, intervino el diputado por el Estado Barinas, Freddy Superlano, quien afirmó que la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela es pisoteada y violada sistemáticamente por el régimen y sobre todo en este momento el artículo 83 que se refiere a un derecho social fundamental como es la salud, que el Estado tiene la obligación de garantizar, como parte del derecho a la vida.
Aseguró que el COVID-19 está haciendo estragos fundamentalmente en las distintas barriadas, caseríos de grandes ciudades del país, donde ha sido tratada esta pandemia con gran irresponsabilidad, pero sobre todo es usada como herramienta de control social por parte de los jerarcas que hoy usurpan el poder.
“Nos hablan de vacunación masiva, cuando solo una pequeña parte de la población se ha vacunado, comenzando por la cúpula gobernante y militar del régimen. En Venezuela estamos lejos de un plan de vacunación masivo. Para poder cumplir con la inmunidad del 70 por ciento de la población, al menos se necesitan inmunizar 15 millones de personas, es decir un millón de venezolanos por semana”, precisó el diputado Superlano.
Indicó que el improvisado plan de vacunación del régimen a través de la plataforma del carnet de la patria, el mismo sistema que se ha utilizado para la discriminación política en el país. Es estos mementos cuando el estado venezolano está siendo enjuiciado ante la CPI por crímenes de lesa humanidad, sigue insistiendo en su sistemática violación, al colocar a millones de venezolanos, que no comulgan con sus ideas socialistas, como adversos enemigos al régimen.
“Esto es un plan de vacunación o es otra farsa para mantener el control social de un pueblo aterrorizado por una pandemia que cada día cobra más vidas. Al ritmo que va este plan de vacunación es más posible que la pandemia termine con la vida del 70 por ciento de la población en Venezuela, que el Estado vacune al 70 por ciento de los venezolanos este mismo año”.
Precisó que sin vacuna no hay plan, por lo que deben permitirse varias vías para que ingresen las vacunas al país. Asu juicio la politización del ingreso de las vacunas es un “genocidio silencioso”, que deben encender las alarmas de la Comunidad internacional.
“Desde esta Asamblea Nacional Legítima exhortamos al mundo a ver de cerca la difícil situación que se vive en Venezuela. No es solo una crisis humanitaria compleja, es la muerte campante ante la mirada atónita de un pueblo indefenso, secuestrado, amenazado, torturado y perseguido que se debate entre el hambre y la pandemia, pero sobre todo ante la mirada impávida del mundo, que solo observa como cientos de miles cruzan la frontera para salvar sus vidas, mientras una cúpula gobernante reina sobre los escombros donde fue antes un gran país”, subrayó Superlano.
ccn
