Las dietas depurativas son como los coleccionables, ya que cada temporada en un momento dado del año las teles se inundan con anuncios de productos a coleccionar y es una costumbre que vemos año tras año. Y con las dietas depurativas pasa un poco lo mismo. Rara es la primavera en la que no nos bombardean con productos desintoxicantes que nos prometen la pérdida casi milagrosa de todos los kilos ganados durante los rigores del invierno con sus platos contundentes.
Muchas son las personas que las siguen todos los años, sin resultado alguno. Pero, los expertos advierten que en la mayoría de los casos estos productos no aportan nada diferente que un efecto placebo. Si esto no os es suficiente, Nosotras os damos las siete claves que os deben hacer reflexionar seriamente sobre seguir o no una de estas dietas:
Desequilibrio: estas dietas se basan en un alimento estrella y como todas sabemos, lo ideal en una forma de alimentación saludable es no descuidar ni un producto de la pirámide alimenticia. Es muy importante comer de todo y en proporciones equilibradas.
Brevedad: este tipo de dietas nos aseguran que en muy poco tiempo perderemos todo el peso necesario, algo que no es ni efectivo ni sano. Los cambios en nuestros hábitos alimenticios sólo serán efectivos si los conservamos durante mucho tiempo.
Descompensada: gracias a una dieta equilibrada podemos compensar los excesos de navidades o fiestas señaladas, todo gracias a la alimentación. Con las dietas depurativas perdemos este efecto.
Precio: todas estas dietas tienen un precio nada desdeñable, con el consiguiente efecto para nuestros bolsillos. Y aunque al principio hagamos el esfuerzo de probarlas, después nos damos cuenta que hemos gastado dinero inútilmente y sin resultado alguno.
No tan ‘naturales’: el reclamo de que son productos naturales es muy usado en este tipo de bienes de consumo pero debemos tener en cuenta que no todo lo natural es saludable. Basta con leer la letra pequeña para darse cuenta.
Sólo reducción de peso: estas dietas sólo consiguen hacernos bajar de peso y no influyen en absoluto de forma saludable en otros aspectos de nuestro cuerpo como el sistema cardiovascular o el inmunológico, uno de los sistemas que se más afectados con estas dietas.
Diuréticas: la mayoría de las dietas depurativas se basan en diuréticos, lo que da la falsa sensación de estar adelgazando cuando lo que se hace es ir simple y llanamente mucho al baño.
Es importante consultarlo antes con un médico y, sobretodo, hacer ejercicio físico de forma regular.
Fuente: Nosotras
