España y en Turquía votan este domingo 28 de mayo. Unas, las españolas, son elecciones municipales y autonómicas, vistas como un adelanto de las generales de fin de año. Las turcas son la segunda vuelta de las presidenciales entre Recep Tayip Erdogan, que tiene 20 años en el poder, y Kemal Kiliçdaroglu, cabeza de una amplia alianza opositora de notorio avance, aunque insuficiente en la primera vuelta del 14 de mayo. Una elección esta de impacto mundial.
Los españoles elegirán 8.135 alcaldes -25 veces más de las que existen en Venezuela-, gobierno en 12 de las 17 comunidades autonómicas y otras entidades menores. Cerca de 23 millones de personas irán a las urnas, algo más del 60% de los votantes, que escogerán 72.000 representantes políticos. Extensa movilización electoral cuyos resultados se constituirán en un termómetro del ánimo político de los españoles y, casi con seguridad, perfilarán un nuevo mapa del poder.
¿Será un «referéndum» sobre la gestión de Pedro Sánchez al frente del gobierno español? ¿O el carácter local y autonómico de los comicios permitirá a las izquierdas capear el temporal, como advirtió precavido el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo?
Los sondeos –no todos, porque se mueven a gusto del contratista- prevén un giro a la derecha, un descalabro para Podemos, el socio hasta ahora más cercano al gobierno de Sánchez, y un buen trozo menos del pastel para el PSOE. Se fortalecerá la figura de Isabel Díaz Ayuso, que roza la mayoría absoluta en la Comunidad de Madrid; también el PP y su líder Feijóo de cara a las elecciones generales. Vox, a la derecha de la derecha, va a un serio examen de partido mayor de edad: es su primera participación en un megaproceso como el del 28M. No dejar que mande la izquierda es su consigna.
Los socialistas tienen la mirada puesta en las comunidades donde gobiernan: Valencia, Rioja, Castilla-La Mancha, que pudieran perder, y Aragón, Asturias, Baleares, Navarra, Extremadura y Canarias, escenarios muy disputados que obligarán a arduas negociaciones políticas. Sin embargo, es posible que se impongan en Barcelona, donde Sánchez cerró su campaña el viernes.
Como dato curioso, y expresión de la geografía de la diáspora nacional, numerosos venezolanos de distintas tendencias figuran entre los varios centenares de miles de aspirantes a cargos políticos; como Manuel Domínguez, que compite por la presidencia de la comunidad de Canarias por el PP, y Ana Candal, hija del gran narrador del fútbol venezolano Lázaro Candal, virtual ganadora de un cargo en el ayuntamiento coruñés de Oleiros por el PSOE.
¿Caerá Erdogan?
Los ojos del mundo estarán otra vez sobre Turquía. Tras dos décadas de mandato, Erdogan –un socio del régimen venezolano- enfrenta su mayor reto político frente a una oposición unida. En primera vuelta se impuso 49,4% a 44,9% sobre su rival Kilicdaroglu. Para esta segunda vuelta cada uno de ellos sumó el apoyo de líderes ultranacionalistas. Miembro de la OTAN y, sin embargo, con simpatías con Vladimir Putin, Turquía es un actor clave de la guerra ruso-ucraniana, en el Cáucaso, el Medio Oriente y el Mediterráneo. La eventual derrota de un gobierno autocrático como el de Erdogan abrirá el camino a la restauración democrática.
Editorial de El Nacional