El cuerpo humano es un bello y complejo sistema en el que las necesidades nutricionales se manifiestan, principalmente, en antojos sin que nosotros seamos consciente de ello. Si tu cuerpo necesita una dosis de serotonina, por ejemplo, probablemente te lo haga saber con antojo de chocolate o algo dulce; si necesita proteína, un plato de frijoles o alguna leguminosa te vendría bien.
He aquí 7 alimentos que tu cuerpo te pide cuando tiene una necesidad específica.
Cuando se te antoja arroz y frijoles, necesitas alimentar a tus músculos
La lisina y la metionia son aminoácidos que el cuerpo requiere para su funcionamiento, sin embargo, es incapaz de producirlos. Los frijoles tienen lisina; el maíz, trigo y arroz, metionina.
Desde el siglo pasado, un buena plato de frijoles con arroz se traducía en una buena fuente de nutrientes, y es así. Si quieres proteína (y más músculo), no dudes en comer un un tazón de Moros con cristianos.
Cuando se te antoja chile, necesitas refrescarte
Puede sonar extraño pero en realidad es lógico. La sudoración que provoca la capsaicina, principal componente químico de los chiles, va de la mano con los climas calientes. Al sentir altas temperaturas, el cuerpo comienza a termoregularse por medio del sudor que provoca la picazón causada por la ingesta de chile.
Cuando se te antoja hielo, probablemente necesites hierro
Cuando te apetece masticar hielo, ¡cuidado!, puede ser anemia. El hierro es uno de los principales minerales que previenen la anemia, y no de los síntomas de esta enfermedad es la inflamación de lengua y boca. Cuando ansías llevarte a la boca un cubo de hilo puede ser para mitigar esta inflamación.
Cuando se te antoja un té de jengibre, tu corazón no está muy bien
Ya son conocidas sus bondades: quita el dolor de cabeza, calma la tos, suprime la náusea, entre otras cosas… Pero recientemente se descubrió que esta maravillosa raíz es capaz de reducir los coagulos en el corazón, bajar los niveles de colesterol y fortalecer los músculos cardiacos.
Cuando se te antoja cafeína, necesitas un analgésico
La combinación puede sonar explosiva y peligrosa, pero se ha comprobado que la cafeína potencia el efecto de los analgésicos. Además, se le atribuyen cualidades antidepresivas e incluso estimulantes del sueño, ¿se te antoja una humeante taza de café?
Fuente: Ecosfera