Santiago de Chile (EFE).- Las autoridades chilenas informaron este jueves de la detención la noche del miércoles de Alfredo José Henríquez, señalado como uno de los presuntos autores del crimen del exmilitar venezolano Ronald Ojeda y considerado uno de los líderes de la banda transnacional Tren de Aragua.
Henríquez, de 30 años y apodado el «Gordo Álex», escapó de Chile tras el asesinato de Ojeda, cuyo cuerpo fue encontrado en febrero de 2024, y recientemente había regresado al país sudamericano, según la Fiscalía.
«Presumimos que este sujeto regresó a nuestro país con la finalidad de rearmar los distintos brazos de esta estructura criminal transnacional. Por eso es tan importante la detención de este peligroso delincuente, porque de esa forma evitamos que se vuelva a reorganizar en el país», explicó en rueda de prensa el coordinador del Equipo de Crimen Organizado y Homicidios (ECOH) del Ministerio Público en la Región Metropolitana, Héctor Barros.
Una mujer asiste a un homenaje al exmilitar venezolano asesinado en Chile Ronald Ojeda en la comuna de Independencia, en Santiago (Chile), en una fotografía de archivo. EFE/ Ailen Díaz
Henríquez, de nacionalidad venezolana, fue capturado tras varios operativos y allanamientos registrados en los últimos días en la capital.
Detención clave contra el Tren de Aragua
Con él, ya van doce personas detenidas hasta ahora por el crimen de Ojeda, aunque aún se desconocen los autores intelectuales del asesinato.
Según las autoridades, Henríquez fue una de las personas que se hizo pasar por un agente policial chileno para detener a Ojeda en su casa el 21 de febrero de 2024.
Disidente del Gobierno de Nicolás Maduro y asilado político en Chile, los restos de Ojeda se encontraron diez días después en una localidad periférica de la capital, sepultados debajo de un bloque de cemento.
La tesis de la Fiscalía chilena, avalada también por el Gobierno de Gabriel Boric, afirma desde el inicio de las investigaciones que el crimen de Ojeda tuvo un «móvil político».
Un crimen Crimen posible móvil político
Según difundió el Ministerio Público en febrero, varios testigos de la investigación apuntan a autoridades del gobierno venezolano.
«Seguimos sosteniendo la tesis de que es un hecho político», reiteró el fiscal Barros este jueves.
Las indagatorias por el secuestro y homicidio del exmilitar han deteriorado las relaciones entre Chile y Venezuela. El Gobierno de Venezuela evidenció la ruptura entre ambos países y solicitó en enero el cierre de los dos consulados chilenos en el país caribeño «como consecuencia de la suspensión de las relaciones diplomáticas» entre Santiago y Caracas.
Sin embargo, en la práctica, los vínculos estaban rotos desde agosto pasado, cuando Maduro ordenó la salida de la diplomacia y se cerró la embajada chilena en Venezuela después de que Boric calificara de fraudulentas las elecciones del 28 de julio de 2024.