¡Ocho veces! No está leyendo mal, son ocho las veces que ha sido desmantelada por los choros la Unidad Educativa Nacional Fray Pedro de Ágreda, también conocida como “El Pollito”, en los Jardines del Valle, en Caracas.
El último hurto fue durante la madrugada de este lunes. Esta vez, los malandros cargaron con balastros de las lámparas de diferentes salones, tuberías de los baños de los estudiantes, cableado de luz, de teléfono y del servicio de conexión inalámbrica, el motor de la nevera de la cantina, brequera y rejas.
Los choros no solamente hurtan en el liceo, también impera el microtráfico de drogas y los juegos de azar, dentro y fuera.
“Por octava vez en los últimos dos años, y por cuarta vez en lo que va de 2017, este liceo ha sido visitado por ladrones que han despojado hasta de las ollas a la cantina, la cual está inoperativa. Aunado a eso, la cancha deportiva de la institución fue asumida por un proyecto del Estado para convertirla en una ‘cancha de paz’, con un ambicioso proyecto y hoy, 4 años escolares después, no es más que un cementerio inconcluso, con recursos que se perdieron en el camino dejando sin operatividad al espacio de recreación y formación deportiva y sin que ninguna autoridad de respuesta”, indica una declaración de los docentes que laboran en el liceo.
Para rematar la desgracia de los más de 900 estudiantes que estudian en “El Pollito”, hace 15 días colapsaron las tuberías de aguas negras, dejando sin el servicio de baños a todo el personal y comunidad estudiantil.
Este lunes, luego del robo, una supervisora circuital (que no corresponde a la zona), la docente Yraida Román, recibió las inquietudes, exigencias y reclamos de los voceros estudiantiles, padres y representantes, consejo educativo, personal, docente, administrativo y obrero. “Este procedimiento ha ocurrido en las diferentes ocasiones de robo y no se hadado ninguna respuesta”, añade la nota de los docentes.
De igual forma, se pudo conocer que al menos cuatro centros educativos más de la capital fueron robados, en diferentes parroquias.
“Toda la comunidad estudiantil y demás integrantes mostraron su angustia al tener un liceo sin cancha deportiva, sin cantina escolar, sin suficiente personal obrero y administrativo, sin un supervisor circuital y ninguna autoridad que dé respuesta a las innumerables cartas llevadas a organismos competentes”.
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Por Confirmado: Gabriella Garcés