Con un “ticketcito para la comida” y un café para aguantar la espera en el Aeropuerto Internacional Arturo Michelena, tuvieron que conformarse los pasajeros de Aruba Airlines, debido a los retrasos de cinco horas registrados el día de ayer en vuelos con destino Aruba.
El vuelo tenía que salir a las 12 del mediodía, según estaba impreso en el boleto. Los usuarios acudieron puntuales a las 8:00 de la mañana para registrarse y hacer el chequeo correspondiente hasta que les avisaron, aparentemente sin razón alguna, que el avión despegaría a las 5:00 de la tarde.
Entre algunas de las respuestas que -presuntamente- escucharon para justificar el hecho, destacaron las averías, un retraso del vuelo anterior y el cansancio de la tripulación.
Alrededor de las 2:30 de la tarde, Anthony German, quien se encontraba sentado y resignado en el suelo, señaló que no les explicaron los motivos y recibió gritos por parte del gerente.
María Laura Padrón
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