En un estudio recién publicado, varios médicos detallan el caso de un hombre de 31 años, totalmente sano, que fue trasladado de urgencia al hospital en ambulancia tras sufrir un colapso cerebral y convulsiones.
Los exámenes físicos que se le realizaron informaron de la confusión del paciente, que se encontraba adormecido y en un estado alterado de conciencia.
Más tarde, se informó de que el hombre sufría náuseas y fuertes dolores de cabeza desde hacía siete días, tiempo en el que reconoció comenzar a olvidar nombres. Además, admitió sentir «un intermitente dolor en el oído izquierdo y haber perdido audición».
Cuando los médicos realizaron una tomografía computarizada (TAC) en el cráneo del hombre, detectaron abscesos llenos de pus en el tejido que rodeaba su cerebro, lo que reveló al culpable de la infección: la Pseudomonas aeruginosa, un patógeno muy peligroso.
Un fragmento de bastoncillo atascado
El equipo médico cree que éste fue el motivo de la infección, conocida como otitis externa necrotizante (NOE), que afecta al canal auditivo externo (EAC).
Un examen físico indicó que el causante más probable de la dolencia fuera un fragmento de bastoncillo de algodón que se había atascado en la cabeza del hombre.
Los científicos explican que el riesgo de infecciones por cuerpos extraños dentro de la EAC es un factor que puede causar otitis externa, una inflamación del canal auditivo, también conocido como «oreja de nadador», pero hasta el momento, no habían determinado que produjese NOE.
Déficit neurológico
Afortunadamente para el paciente, la eliminación del bastoncillo de algodón y una gran cantidad de antibióticos administrados en el transcurso de ocho semanas para tratar su infección solucionaron los graves problemas neurológicos que estaba experimentando.
«Al finalizar su ciclo de antibióticos, el paciente se encontraba correctamente sin mostrar un déficit neurológico y sin síntomas residuales del oído», escriben los autores del informe.
Los investigadores advierten del peligro de introducir cualquier objeto en nuestros oídos, incluso si la intención es limpiarlo internamente, algo que aseguran que no es necesario. «El uso de bastoncillos de algodón dentro de las orejas es común y desde hace mucho tiempo se advierte de que causa complicaciones como traumatismo, perforación de la membrana timpánica, cerumen impactado, infección y retención del mismo bastoncillo de algodón», señala el informe.
Fuente: 20 Minutos