Se trata del astro más importante de nuestra existencia
El Sol, la centro del Sistema Solar
FERNANDO BURGOS
El Sol es la estrella más grande que conocemos. El centro de nuestro universo, y el que mantiene unido el Sistema Solar. Se trata de una estrella enorme con un diámetro de 1,4 millones de kilómetros y que está relleno de gases calientes que hacen imposible la vida en él.
La relevancia del Sol para la Tierra es incalculable, aunque entre los cientos de miles de estrellas de las galaxias, pasa desapercibido.
Las capas del Sol
El Sol cuenta con diferentes capas que lo componen. Esta gran estrella posee una estructura compleja donde encontramos la fotosfera, la capa que vemos, que se calienta a una temperatura de 5726 grados centígrados.
Por debajo de esta fotosfera el calor se mueve despacio desde el núcleo central hacia la superficie y el material se acaba enfriando y cae en columnas.
Debajo de esta zona existe otra mucho más radioactiva donde el calor viaja en forma de radiación. En el centro del Sol está el conocido como núcleo donde la temperatura es de 15.600.729 grados.
El Sol se mueve
Aunque parezca que no, el Sol sí se mueve, pero no llegamos a percibirlo por completo. Lo hace mientras orbita el centro de la Vía Láctea y arrastra al Sistema Solar consigo.
Con esta fuerza de arrastre de la Vía Láctea, el Sol solamente tarda en dar una vuelta completa unos 230 millones de años.
La estrella más cercana a la Tierra
Las estrellas se encuentran a millones de años de nuestro planeta, curiosamente, la más cercana que tenemos es el Sol que se encuentra a 149.600.000 kilómetros nada menos.
Además, para llegar hasta él tendríamos que cruzar la órbita de Venus, y la de Mercurio, los dos planetas más cercanos a la gran estrella.
Importante en muchas culturas
Una estrella de estas dimensiones y tan importante para la vida en la Tierra, no pasó desapercibida para las culturas de la antigüedad. En Japón, país del ‘Sol Naciente’, es su emblema oficial, al que rinden homenaje desde hace milenios.
En otras culturas encontramos muchas deidades relacionadas con el astro de fuego, como Ra para los egipcios, Helios para los griegos o Apolo para los romanos.
Algún día se apagará
Lo más sorprendente del Sol es que un día acabará apagándose, con lo que arrastrará a la destrucción a todo el Sistema Solar.
El Sol no siempre estuvo ahí, nació, ha crecido y cada año crece más. Según los expertos, cada 10 mil millones de años se vuelve un 10% más brillante por lo que las condiciones de vida de la Tierra se complican.
Algún morirá y con él la vida en la tierra y en el resto de planetas conocidos de nuestro sistema.
