El presidente de la Junta Reestructuradora de la Cruz Roja, Ricardo Cusanno, ofreció un balance tras cumplirse 90 días de la intervención de la institución.
Resaltó el «profundo compromiso del voluntariado» y el «componente humano que lleva día a día la actuación de la Cruz Roja».
«Eso va de la mano con un componente sanitario, con hospitales donde hay mística en los trabajadores, en las enfermeras, en los médicos. Donde hay voluntad de servir«, dijo.
Pese a que la junta consiguió algunas «deficiencias» durante la evaluación inicial a la institución, enfatizó la «voluntad de trabajo» de cada una de las personas que forman parte de la Cruz Roja.
«Hemos tenido en 90 días más de 300 reuniones con cada una de las personas que forman parte del movimiento en las regiones«, precisó.
Objetivos de la junta
En entrevista concedida al programa A Tiempo que transmite Unión Radio, informó que la reestructuración de la Cruz Roja tiene «cuatro grandes líneas» que se deben cumplir en 12 meses.
El primer paso es «construir espacios de integridad y dignidad para voluntarios y trabajadores«.
En la segunda línea trabajarán por los derechos y mecanismos de denuncias para los trabajadores. Además, crearán un control administrativo y visión estratégica de la organización.
Cussano indicó que el tercer objetivo es construir unos «estatutos modernos, que estén acordes con el momento», ya que los que están en vigencia fueron creados en 1.986.
Aclaró que el nuevo estatuto no tendrá una visión de control, sino más bien una «visión estratégica, prospectiva» para que la institución sea «mucho más eficiente».
UR