Cuba impulsa ley de inversión extranjera, pero «no está en venta»

Cuba impulsa ley de inversión extranjera, pero «no está en venta»

Los parlamentarios cubanos –todos ellos, de extracción castrista– coincidieron en que la nueva ley de inversión extranjera que se aprobará a fines de marzo no significará «la venta del país ni un retorno» a los años anteriores a la revolución iniciada en la isla por Fidel Castro en 1959, según informó este miércoles el diario oficial Granma.

 

La Asamblea Nacional tendrá, el 29 de marzo, una sesión extraordinaria para analizar y votar el proyecto de ley, según la convocatoria del Consejo de Estado del país que fue divulgada este miércoles en el sitio oficial Cubadebate.

 

Desde el pasado lunes y como trabajo previo a esa sesión parlamentaria, el ministro de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca, se reunió con diputados de todo el país para discutir la legislación. Fue en uno de estos encuentros donde se llegó a la conclusión de que la apertura de la isla no significará que se «venda» al extranjero.

 

Los parlamentarios coincidieron, además, en que la nueva ley «está en plena sintonía» con el proceso de ajustes económicos que impulsa el gobierno de Raúl Castro para «actualizar» el socialismo cubano y enfrentar la crisis económica que arrastra el país.

 

Al presentar detalles en la reunión sobre el contenido de la ley, Malmierca sostuvo que está «lejos de significar un retroceso». «Ofrece mayores garantías e incentivos a la inversión extranjera y asegura que la atracción de capital contribuya de manera eficaz a los objetivos del desarrollo sostenible y a la recuperación de la economía nacional», explicó.

 

El ministro castrista reiteró que esos objetivos tienen «connotación estratégica» para Cuba y subrayó la importancia de «fortalecer el prestigio financiero del país, diversificar las relaciones económicas internacionales y ganar la confianza de los inversionistas con un clima de transparencia, reglas claras e incentivos».

 

 

La nueva ley modificará la vigente desde 1995 con el objetivo de adecuarse al contexto actual y a las demandas del Gobierno, que contempla «continuar propiciando» la participación de capital extranjero «como complemento del esfuerzo inversionista nacional en aquellas actividades que sean de interés del país».

 

Aunque Cuba comenzó a abrirse a las inversiones extranjeras desde mediados de la década de los años ochenta del siglo pasado, fue en los noventa que impulsó esa opción a partir de la crisis económica generada por el colapso del bloque socialista, generado por la desintegración de la Unión Soviética.

 

Actualmente, el país caribeño busca atraer capitales extranjeros y desarrolla proyectos como la recién creada Zona Especial de Desarrollo del puerto de Mariel, financiada con capitales brasileños y considerada la más importante obra de desarrollo que se ejecuta en su territorio.

 

El Parlamento cubano de 612 miembros, ningún opositor entre ellos, sólo sesiona dos veces al año –en julio y diciembre– y tiene la tradición de aprobar las leyes por unanimidad. El texto de la nueva ley, redactado por el Ministerio de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, no ha sido publicado todavía.

 

Agencias

Comparte esta noticia: