¿Cuánto tiempo duró la extinción de los dinosaurios?

¿Cuánto tiempo duró la extinción de los dinosaurios?

Todo apunta a que ocurrió muy rápido, cuando un meteorito descomunal impactó en la Tierra hace 66 millones de años, desatando una catástrofe apocalíptica. Pero no todos los dinosaurios se extinguieron… De hecho, algunos siguen entre nosotros.

Este artículo forma parte de la sección The Conversation Júnior, en la que especialistas de las principales universidades y centros de investigación contestan a las dudas de jóvenes curiosos de entre 12 y 16 años. Podéis enviar vuestras preguntas a tcesjunior@theconversation.com

 

El final de los dinosaurios aconteció súbitamente, cuando sus vidas fueron interrumpidas por la visión de una gran bola de fuego que caía sobre la Tierra, y que desató un apocalipsis del que los reyes del Mesozoico no pudieron escapar. Ni la poderosa mordida del Tyrannosaurus rex ni el enorme tamaño del saurópodo Alamosaurus sanjuanensis (26 metros y 20 toneladas) pudieron salvar a estas especies de la catástrofe que se cernía sobre ellas.

 

La teoría mayoritariamente aceptada para la extinción del límite Cretácico-Paleógeno, también conocido como límite K/T (de Cretácico y Terciario), es el impacto de un meteorito de unos 10 kilómetros de diámetro que golpeó la Tierra hace unos 66 millones de años.

 

 

Un accidente cósmico

La roca espacial (un cometa o un asteroide) alcanzó nuestro planeta a una velocidad de varias decenas de kilómetros por segundo, con una capacidad destructiva equivalente a cien millones de bombas de hidrógeno. Chocó en una zona marina poco profunda que actualmente corresponde al golfo de México y la península de Yucatán, en México. Es el llamado cráter de Chicxulub.

 

A consecuencia de ese “accidente cósmico” se extinguieron más de la mitad de las especies. Entre los grupos de organismos que se esfumaron había dinosaurios, reptiles marinos, ammonites (moluscos cefalópodos con una gran concha externa), plantas e incluso microorganismos.

 

No obstante, no fue la peor en la historia de la Tierra: por ejemplo, la extinción del final del Pérmico, hace unos 252 millones de años, eliminó nada menos que al 90 % de las especies.

 

De cualquier forma, los dinosaurios constituyen un caso particular. Aunque su desaparición se asocia al límite K/T, en los últimos 10 millones de años del Cretácico el número de especies ya había disminuido significativamente debido a un enfriamiento global de unos 7º C.

 

Además, no se puede considerar que se extinguieran totalmente, ya que las aves son descendientes de un grupo de dinosaurios terópodos. Por lo tanto, la respuesta objetiva a la pregunta del titular es que los dinosaurios no se fueron del todo. Siguen entre nosotros.

 

 

Crónica de una catátrofe

El meteorito debió atravesar la atmósfera en un par de segundos y produjo una compresión del aire a su paso que generó una explosión sónica de dimensiones inimaginables. El aire en torno a aquella roca espacial debió calentarse a temperaturas cuatro veces superiores a la del Sol.

 

El impacto produjo una onda de choque que comprimió la roca de la superficie terrestre y del propio meteorito con tanta intensidad que la posterior descompresión dio lugar a una fusión y la volatilización de ceniza y vapor.

 

Según Walter Álvarez, profesor de Geología de la Universidad de Berkeley (California), probablemente se produjo una bola de fuego de roca vaporizada que salió expulsada debido a su propia presión y calor. Debió sobrepasar incluso el límite superior de la atmósfera, antes de caer nuevamente sobre la Tierra, cubriéndola de gran cantidad de partículas.

 

Se calcula que el agujero formado en el momento de la colisión tendría unos 40 km de profundidad, pero inmediatamente se desplomó y dio lugar a un cráter más amplio y menos profundo, de unos 175 km de diámetro.

 

El impacto alcanzó una zona donde existían rocas calizas con casi tres kilómetros de espesor. Estas, sometidas a las elevadas temperaturas del choque, liberaron a la atmósfera cantidades desorbitadas de CO₂ con tanta energía que debió arrastrar gran cantidad de fragmentos de roca.

 

 

Fuego, polvo y oscuridad

La destrucción de todos los organismos vivos fue absoluta en un radio de unos cuantos cientos de kilómetros. En zonas más distantes, a miles de kilómetros, los animales pudieron ver un enorme destello seguido de una onda de choque de aire comprimido, avanzando a increíble velocidad.

A continuación, llegaría una nube de fuego y polvo a altísimas temperaturas que carbonizó prácticamente todo, mientras que la superficie terrestre propagaba un terremoto de dimensiones apocalípticas, con ondas de gran energía y duración.

 

De la atmósfera caía una lluvia de fragmentos de roca y trozos fundidos que propagaron el calor en forma de radiación infrarroja. La combustión de las masas forestales oscureció el cielo con humo, cenizas y hollín, a la vez que se consumía el oxígeno atmosférico.

 

 

Olas de un kilómetro de altura

El tsunami ocasionado por el gran impacto probablemente formó olas de hasta un kilómetro de altura que avanzaron por lo que hoy es Estados Unidos varios miles de kilómetros tierra adentro. Se han encontrado enormes canales excavados en el fondo del golfo de México y sedimentos arrastrados por olas gigantescas en los que se mezclan fragmentos de roca fundida expulsados por la explosión.

A otras zonas más alejadas, situadas en otros continentes, llegaron menos partículas de las expulsadas a la atmósfera por la explosión, y la incidencia de los incendios debió ser menor que en Norteamérica. No obstante, esas regiones fueron alcanzadas por otros eventos letales que explican que la extinción masiva fuera de escala global

 

Al cabo de unas semanas o meses del impacto, los incendios habrían remitido, los vientos huracanados habrían amainado y los tsunamis habrían perdido fuerza, pero la atmósfera y la superficie terrestre se estaban enfriando gracias al polvo, ceniza y hollín que caían lentamente e impedían el paso de la luz del Sol.

 

La intensa oscuridad duró unos meses, destruyendo la productividad de la fotosíntesis que sustenta las cadenas de alimentación a través de herbívoros y depredadores.

 

 

Llega la lluvia ácida

Cuando volvió la luz, el clima se volvió excesivamente cálido debido a la gran cantidad de gases de efecto invernadero emitidos a la atmósfera durante el impacto, la calcinación de los carbonatos sobre los que cayó el meteorito y los numerosos incendios. El calor extremo duró cientos de años, hasta que los niveles de CO₂ disminuyeron.

 

Otro de los efectos a nivel atmosférico fue la lluvia ácida y el envenenamiento de las aguas por metales pesados. El calentamiento producido durante el impacto aumentó tanto la temperatura de las partes bajas de la atmósfera que las moléculas de nitrógeno atmosférico (N2) se descompusieron y reaccionaron con el oxígeno formando óxido nitroso (NO) que, combinado con el vapor de agua, dio lugar al ácido nítrico (HNO₃). Esta lluvia ácida dañó la vegetación y reaccionó con las rocas, envenenando las aguas continentales.

 

La desaparición repentina de la mitad de los géneros de plantas y animales marcó el final de la Era Mesozoica. No se conoce bien por qué determinados grupos de organismos sobrevivieron. Obviamente, los dinosaurios de gran tamaño, que necesitan grandes cantidades de alimento, no se encontraban entre los que tenían más posibilidades. Sin embargo, también se extinguieron algunos géneros de dinosaurio del tamaño de una gallina, y salieron adelante otros reptiles, como los cocodrilos.

 

En cualquier caso, los supervivientes encontraron un mundo diferente lleno de posibilidades que favoreció la diversificación y adaptación a las nuevas condiciones, y de este modo la aparición de nuevas especies, lo que se denomina una radiación evolutiva. Los mamíferos y las aves que sobrevivieron se encuentran entre los grupos que mejor se adaptaron a esta nueva era.

 

 

Culturizando

Comparte esta noticia:

Contáctanos

Envíe sus comentarios, informaciones, preguntas, dudas y síguenos en nuestras redes sociales

Publicidad

Si desea obtener información acerca de
cómo publicar con nosotros puedes Escríbirnos

Nuestro Boletín de noticias

Suscríbase a nuestro boletín y le enviaremos por correo electrónico las últimas publicaciones.