La primera película de la historia se proyectó el 22 de marzo de 1895 en París, en el ‘Salon Indien’ del Grand Café, en el Boulevard des Capucines. Se trataba de ‘La salida de la fábrica Lumière en Lyon’ y consistía en una sola toma de 57 segundos de duración, de unos trabajadores saliendo de la fábrica Lumière.
Se proyectó luego de que los hermanos Lumière dieran una conferencia sobre su reciente invento, el cine. Así fue como ofrecieron la primera exhibición de una película cinematográfica.
Además de esta película, se proyectaron varias como la ‘Llegada de un tren a la estación de la Ciotat’, ‘El desayuno del bebé’ o ‘El regador regado’. Todas eran grabaciones sobre momentos de la vida cotidiana, reconocibles por su brevedad, la ausencia de actores, decorados naturales y montaje, y la posición fija de la cámara.