Un grupo de investigadores, formado por miembros de Adobe, Microsoft y el MIT, desarrollaron un micrófono visual que detecta vibraciones microscópicas en casi cualquier tipo de superficie, las analiza y extrapola la información para imitar las ondas sonoras que las causaron.
Durante una de las pruebas, los científicos apuntaron el micrófono hacia el interior de una habitación, a través de una puerta de cristal, y el sistema se enfocó en una bolsa de papas fritas que se encontraba tirada en el piso; analizó las vibraciones microscópicas en su superficie y reconstruyó una conversación que se llevó a cabo en dicha habitación.
El sistema opera mediante un algoritmo que analiza las vibraciones y las convierte en audio.
El sistema utiliza una cámara digital para leer cada una de las líneas de pixeles de cada pictograma que comprende un video, de manera individual, y esto le permite descubrir las pequeñas variaciones en la superficie de los objetos.
Y aunque un producto de esta naturaleza podría causar gran temor entre algunas personas, la posibilidad de que alguien use la tecnología para espiar a sus vecinos o competidores de negocios todavía es lejana, ya que actualmente se necesitan cámaras que puedan registrar hasta 6000 cuadros por segundo –la cámara promedio actual graba 60 cuadros por segundo–.
Fuente: Yahoo